Tensión y votación histórica: Mendoza habilitó un proyecto de megaminería de cobre

Martes 09 de Diciembre de 2025, 15:34

Se trata de PSJ Cobre Mendocino, de capitales suizos y argentinos o mina San Jorge como se lo llama informalmente.



Mientras manifestantes rodeaban la Legislatura provincial, el Senado de Mendoza aprobó este martes —con 29 votos a favor y 6 en contra— la Declaración de Impacto Ambiental que habilita un megaproyecto de explotación de cobre en Uspallata. Se trata de PSJ Cobre Mendocino, un emprendimiento de capitales suizos y argentinos conocido popularmente como mina San Jorge.

La votación marca un hito: después de más de una década de intentos fallidos, Mendoza vuelve a abrirle la puerta a la megaminería.

Según informó la empresa, la mina podría operar durante 27 años y demandará una inversión total de 559 millones de dólares, de los cuales 15 millones se utilizarán en el primer año. El método elegido será la flotación mecánica, un proceso habilitado por la Ley provincial 7722 que no utiliza cianuro, mercurio ni ácido sulfúrico, y que promete minimizar el uso de agua mediante un circuito cerrado.

La compañía también aclaró que recurrirá exclusivamente al agua del Arroyo El Tigre, un curso interno de la Estancia Yalguaraz, asegurando que no competirá con el abastecimiento comunitario, agrícola ni urbano.

La ministra de Energía y Ambiente provincial, Jimena Latorre, celebró la aprobación y sostuvo que el proyecto refleja el trabajo de “organismos técnicos, académicos y científicos”, además de la participación ciudadana durante la Audiencia Pública. “Pocas actividades tienen hoy tanto control como esta”, afirmó, destacando la necesidad de cobre para la transición energética.

En paralelo, la Legislatura también debatió el Fondo de Compensación Ambiental, el régimen de Regalías Mineras y las Declaraciones de Impacto Ambiental del proyecto Malargüe Distrito Minero Occidental II.

Protestas y preocupación por el impacto ambiental

Afuera del recinto, las protestas se intensificaron. Asambleas ambientales y vecinos expresaron su temor por las posibles consecuencias que la megaminería podría tener sobre el agua, un recurso crítico en una provincia afectada por 15 años de sequía.

Entre los principales reclamos, se señala el riesgo de contaminación en la cuenca de Uspallata, que desemboca en el Río Mendoza, del que dependen más de un millón y medio de habitantes. También advierten que la actividad podría agravar la crisis hídrica.

El geógrafo y docente de la Uncuyo Marcelo Giraud, integrante de la Asamblea Popular por el Agua, advirtió que “tres de cada cuatro mendocinos viven dentro de la cuenca del Río Mendoza” y que el diseño del proyecto “no garantiza que no pueda contaminar el acuífero”.

Como antecedente, los manifestantes mencionaron el derrame de cianuro ocurrido en Veladero (San Juan) en 2015, considerado el mayor de la historia argentina.

Frente a estas críticas, la ministra Latorre fue categórica: “Es falso que haya riesgos de contaminación de la cuenca del Mendoza”.