Lunes 15 de Diciembre de 2025, 16:32
Rocío Marengo rompió el silencio y salió con los tapones de punta luego de ser duramente cuestionada en redes sociales por mostrarse en una salida nocturna mientras su hijo Isidro continúa internado en neonatología.La mediática fue mamá por primera vez el pasado 3 de diciembre. El nacimiento prematuro del bebé obligó a que quedara bajo cuidados médicos, mientras ella recibió el alta y regresó a su casa. Sin embargo,
una serie de fotos compartidas en Instagram —donde se la vio arreglada y sonriente junto a familiares— desató una ola de críticas y cuestionamientos sobre su rol como madre.
Lejos de quedarse callada, Marengo respondió con un fuerte descargo en sus redes:
“¡La gran mentira de las redes! Mostrás un video vestida, salís a comer con tu familia y te juzgan de mala madre, sin saber cómo estás por dentro”.Visiblemente dolida, apuntó contra quienes sacaron conclusiones por su apariencia: “Te ponés una remerita con lentejuelas y aseguran que te estás cagando de risa, como si la ropa dijera algo. Sus comentarios hablan de ustedes, no de mí”.
Pero el mensaje fue aún más crudo cuando reveló detalles íntimos y hasta ahora desconocidos de su embarazo:
“Si quieren, les muestro los coágulos y las hemorragias que tuve todos estos meses. Se me desprendió la placenta y tampoco lo mostré ni lo conté”.Rocío también recordó el dramático momento del parto: “Fue de urgencia. Con Isi corrimos riesgo de vida. Fue un ‘ya al quirófano’. Mi obstetra fue clave para que hoy estemos contando esta historia”.
En ese contexto, dejó en claro que las críticas no la afectan en su maternidad: “
Jamás me van a hacer dudar de mi rol como mamá. Soy la mejor. Busqué a mi bebé con todo mi amor, paciencia y fuerza”.
Para cerrar, llevó tranquilidad sobre la salud de su hijo: “Isidro está muy bien. Es cuestión de días y nos vamos a casa”.
Mientras tanto, la modelo sigue compartiendo postales del día a día en neonatología. En una de sus últimas historias, publicó una tierna imagen del bebé y escribió con humor: “Mami, no me saques más fotos”, buscando bajar la tensión tras días de fuerte exposición mediática.