Viernes 26 de Diciembre de 2025, 07:47
San Miguel de Tucumán concentra dos tercios de la basura producida en el área metropolitana, según los datos oficiales. El desafío del GIRSU: reducir el volumen que llega a Overo Pozo.El Consorcio Metropolitano para la Gestión de los Residuos Sólidos Urbanos (GIRSU) enfrenta a diario el desafío de gestionar miles de toneladas de residuos sólidos urbanos que producen las ocho ciudades que lo integran. En conjunto, el conglomerado en el que residen poco más de un millón de tucumanos, genera un promedio de 29.513 toneladas mensuales, lo que se traduce en 354.157 toneladas anuales de basura. Al menos, es la proyección para 2026 realizada sobre el promedio habitual.
El principal aporte proviene de San Miguel de Tucumán, que con 19.539 toneladas por mes y 234.468 al año concentra el 66,20 % del total de los residuos del consorcio. La capital provincial, por su densidad poblacional y actividad económica, se ubica muy por encima del resto de los municipios. Sólo en esta ciudad residen 590.000 personas, según el censo 2022.
En segundo lugar se encuentra Yerba Buena, con una producción de 2.875 toneladas mensuales y 34.502 anuales, lo que representa el 9,74% del total. Le sigue Banda del Río Salí, que aporta 2.520 toneladas por mes y 30.234 por año, equivalente al 8,54%.
Más atrás aparecen Tafí Viejo, con 1.558 toneladas mensuales y 18.696 anuales (5,28%), y Las Talitas, que genera 1.022 toneladas por mes y 12.266 al año (3,46%). En tanto, Alderetes aporta 792 toneladas mensuales y 9.498 anuales (2,68%).
Cierran la lista Bella Vista, con 625 toneladas por mes y 7.498 al año (2,12%), y San Isidro de Lules, que produce 583 toneladas mensuales y 6.995 anuales, representando el 1,98% del total metropolitano.
Las cifras reflejan la magnitud del desafío ambiental que enfrenta el Gran Tucumán: más de 350.000 toneladas de residuos por año que requieren infraestructura, logística y políticas públicas sostenidas para su tratamiento y disposición final. Entre estas ocho ciudades, si uno se lleva por los datos del Censo 2022, habitan alrededor de 1,1
Desde el Consorcio, remarcan la importancia de avanzar en programas de separación en origen, reciclado y reducción de residuos, con el objetivo de disminuir el impacto ambiental y mejorar la calidad de vida de la población del área metropolitana.
El circuito de gestión de los residuos comienza con la recolección y el traslado por parte de los municipios y las 12 comunas que también utilizan los servicios del GIRSU a la planta de separación y clasificación de San Felipe. Luego, la basura es trasladada nuevamente hacia Overo Pozo, en el noreste tucumano. Allí se realiza la disposición final mediante relleno sanitario.
Uno de los grandes objetivos es la reducción del volumen de RSU que llegan a la planta de Overo Pozo. Con ese propósito, desde mayo San Felipe cuenta con una trituradora alemana que permite reducir hasta el 50% del volumen y optimiza los traslados hacia el destino final: el promedio era de 15 toneladas por viaje, y ahora está en el orden de 18 toneladas por viaje. Ya en Overo Pozo, esta gestión del GIRSU adquirió una nueva compactadora que mejora el aprovechamiento del espacio. Hasta el año pasado funcionaban siete celdas, este año se habilitó una más y está en contrucción otra.
Julieta Migliavacca, secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la capital, destacó la importancia de las mejoras en San Felipe. "Reducir el volumen aporta en darle mayor vida útil al relleno sanitario, ya que esto es mucho más fácil de compactar y por otro lado reducimos la cantidad de viajes de transporte hasta Overo Pozo y tenemos menos huella de carbono, o sea, menos emisiones de gases de efecto invernadero que contribuyen al cambio climático global de nuestro planeta”, explicó. En esa planta, añadió, se busca eficientizar el predio y extender la vida útil del relleno sanitario sin requerir terreno adicional al Estado Provincial ni tampoco mayores aportesa los municipios.
La semana pasada, la presidenta del Consorcio, Eugenia Andrade, supervizó las obras de impermeabilización de la nueva celda que se construye en Overo Pozo, la "I". "La última inaugurada en agosto fue la H. Había 7 celdas, porque una de las celdas se usaba como pileta para liquidos lixiviados. Esa pileta se recuperó como celda este año", detalló.
La directiva reforzó la idea central del GIRSU en el predio de disposición final: "reducción de volumen, "tratamiento de los líquidos lixiviados y el aprovechamiento de los RSU en la generación de biogás y su posterior inyección a la red eléctrica".
En marzo el Consorcio licitó las tres operaciones fundamentales. Esas tareas estaban a cargo de la firma Moviser SRL. Finalmente, el Girsu se inclinó por la oferta de las firmas Esur y Ciageser (una UTE ligada al pool de la empresa 9 de Julio), que totaliza $68.142 millones por un período de 60 meses. Esta licitación permitirá un ahorro del 31% en el presupuesto 2026.
Los gastos estimados para 2026 en el Consorcio superan los $ 23.800 millones, de los cuales $ 20.800 millones corresponden a los servicios públicos. El resto se distribuye en el pago de sueldos ($ 1.000 millones), fondos para eventuales contingencias ($ 1.000 millones), y bienes de capital y de servicios no personales ($ 500 millones aproximadamente cada ítem). /Tendencia de Noticias