Dos empleados de Tarjeta Naranja habrían huido con más de $1.500.000 de la firma.
Empleados de Tarjeta Naranja habrían registrado créditos a clientes que no los solicitaron: estafa por $ 1.500.000
Domingo 13 de Agosto de 2017, 11:44
La Justicia de la vecina provincia de Santiago del Estero habría ordenado la detención de dos empleados de Tarjeta Naranja, sospechosos de perpetrar una defraudación de más de $ 1.500.000. Pese al hermetismo, se sabe que la causa es comandada por la fiscal Aída Farrán Serlé, tras la denuncia de las autoridades de la empresa, en contra de un recaudador y un colaborador. La presentación judicial incluye diálogos telefónicos e imágenes de las cámaras de seguridad. Al parecer, el ilícito se habría concretado la semana pasada, en los días dedicados a préstamos a clientes.
La mayoría de los trabajadores logró colocar préstamos por entre $ 180.000 y $ 200.000. Sin embargo, dos empleados provocaron sorpresa colectiva, al cerrar (cada uno) operaciones por casi $ 800.000; cifra considerada récord en la firma, con sus oficinas centrales en calle Pellegrini. Sin embargo, los empleados literalmente "desaparecieron". No se presentaron a trabajar nunca más. Habrían registrado préstamos a nombre de clientes que nunca los solicitaron y se habrían quedado con el dinero. En 24 horas, las autoridades de Naranja indagaron en las cámaras de seguridad. En ellas, se advertiría a los dos empleados llenando una bolsa con dinero chico; en tanto, los fajos más grandes eran acondicionados en mochilas. Sorprendida, la madre de uno de los acusados, al ver que su hijo dejó de ir a trabajar, habría concurrido a la empresa a interiorizarse de lo sucedido.
Cuando se le informó de las sospechas, pidió que no se formule la denuncia y se comprometió en devolver el dinero. Pero las autoridades hicieron la denuncia y los supuestos "empleados infieles" presentaron sendos pedidos de eximición de prisión. La investigación conllevaría efectos multiplicadores, complejos y de imprevisible final. Las autoridades de Naranja deslizaron que el "botín" se compondría de dinero retirado de la caja fuerte y de los préstamos a particulares.