Martes 27 de Febrero de 2018, 08:24
Cuando Camila Borda (11) desapareció, pensaron en una travesura, en un robo y hasta en un accidente. Fueron cuatro horas desesperantes, pero el desenlace no hizo más que empeorar todo. La nena estaba muerta y la autopsia ratificó la sospecha: fue violada y asfixiada en una quinta a 50 metros de su casa. El único acusado, José Carlos Varela (40), está detenido y hoy declarará ante el fiscal del caso.