Crimen de Chacabuco 59: la madre y la hija de Laura piden respeto y aguardan el resultado del estudio de ADN
Viernes 26 de Mayo de 2023, 09:14
EN SILENCIO. La madre de la mujer desaparecida y su hija, a quien cuidó desde que era menor, decidieron dejar la comunicación en manos de un abogado.Los peritos deben establecer en los próximos días la identidad de los restos humanos en avanzado estado de descomposición, que fueron encontrados en la casa de calle Chacabuco 59, donde simultáneamente se registró la desaparición de su dueña, Laura Gabriela Picciuto.
Hay indicios de mucho peso que llevan a la casi seguridad de que se trataría de ella. Su ausencia se remonta a los primeros días de marzo. Desde entonces su madre, María Belén Ortiz, del barrio Monteros Viejo, perdió todo contacto con la mujer.
La señora de avanzada edad, reside en una humilde vivienda junto a su nieta Florencia (20 años), hija de “Gaby”. Doña “Mary” se hizo cargo de la muchacha desde temprana edad, según contaron los vecinos, a raíz de los problemas de conducta que comenzó a mostrar Picciuto, debido a su adicción.
En estos días la octogenaria, que trabajó casi toda su vida como enfermera, deja ver en su rostro las secuelas del momento de angustia que vive. Lo hizo solo para aclarar que no hablaría del caso y que las inquietudes debían ser expuestas ante su abogado, que se haría cargo de la querella.
Esto último ocurriría en el caso de confirmarse que el cuerpo hallado en la cisterna en Chacabuco 59 es el de Laura Gabriela. “Nosotros no vamos a decir nada sobre el hecho y les pedimos que respeten esta decisión”, se encargó de insistir Florencia, hija de Picciuto.
El abogado Gonzalo De la Vega agregó que por ahora permanece a la espera de los resultados de las pruebas de ADN que develará si el cuerpo hallado es o no el de “Gaby”. “Hasta tanto no se establezca si realmente estamos ante el cuerpo de ella, no podemos asumir ninguna querella”, remarcó.
El letrado aclaró que sigue de cerca las investigaciones que lleva adelante el fiscal Carlos Sale con integrantes de la división Homicidios de la Policía. Esta unidad de pesquisas está integrada, entre otros, por los comisarios Adrián Moreno, Diego Bernachi y Jorge Dib.
Los investigadores, en concreto, trabajan con la hipótesis de un crimen y que la víctima sería Picciuto, aunque no tienen aún confirmación acerca de la identidad del cuerpo hallado en la casa qiue en los últimos días, concitó la atención de toda la sociedad Tucumana.
Su desaparición y el hecho de que la mujer vivía ahí, los aventura a avanzar en la búsqueda del presunto autor y del móvil del crimen. Entonces aparece la posibilidad de que “Gaby” podría haber sido asesinada por una disputa por la venta de la casa.
Los efectivos tampoco descartan que pueda tratarse de un femicidio por la pelea que mantuvo con su pareja antes de haber sido vista por última vez. No consideran descabellado, además, que haya perdido la vida por una situación vinculada al consumo de drogas.
Las sospechas acerca del presunto homicidio se orientan principalmente hacia Luis Fumero, el ex esposo. Este tiene una empresa que heredó de su padre. Según surge de las investigaciones, este estaba atravesando un mal momento y andaba con la urgencia de hacerse de capital para rescatar el emprendimiento.
Esa habría sido una razón por la que habría decidido vender la vivienda de Chacabuco 59, desatando la resistencia de su ex pareja. El hombre vive en una modesta casa en Yerba Buena. Fue allanada hace unos días por la Policía que, entre otros elementos, secuestró un celular.
Mientras tanto, en Monteros, los vecinos de la familia de Gaby aún la recuerdan como la joven beldad que ya cuando cursaba la secundaria, atraía todas las miradas, ungida como la reina de los estudiantes, sin poder creer que haya tenido el final que, se sospecha, sería la explicación del macabro hallazgo en la que fue su último lugar de residencia.
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