Miércoles 20 de Septiembre de 2023, 08:30
Hay miles de historias que esconden los pequeños pueblitos de Buenos Aires. Muchos de ellos son reconocidos por la hospitalidad de sus habitantes, mientras que muchos otros comienzan a quedarse sin gente que los habite, transformándose en lugares fantasmas.
La historia de un pueblito en el suroeste de la provincia llamado Estela marcó un antes y un después en el mapeo bonaerense. Con la partida de sus 2 últimos habitantes, este lugar ha quedado en el olvido. Hace más de 30 años, contaba con más de 100 familias viviendo en él.
La suspensión de los recorridos de trenes impactó profundamente a muchos pueblos del interior bonaerense. Estela no escapó a esta realidad y, con la partida de sus 2 últimos residentes, quedó deshabitado
Estela, un recóndito pueblito del partido bonaerense de Puán, ha perdido al último matrimonio que lo habitaba. Jorge Fajardo y María Celia Romero dejaron 30 años de su historia de amor en su mudanza y, con ellos, lo último que le daba vida al lugar que está a 665 kilómetros de CABA
En su mejor época, Estela contó con una comisaría, una tienda, una fábrica de harina y una escuela. Esta última seguirá abierta para los 5 alumnos de campos cercanos.
Ahora, solo quedan sus calles polvorientas y empedradas, ideales para una escapada ideal de fin de semana a este nuevo "pueblo fantasma".
Esta es la escuela que seguirá abierta para recibir a 5 alumnos de los alrededores de Estela