Un pueblo sublevado y una madre oculta con sus hijos para evitar que se los lleven a Alemania conmueven a toda Córdoba

Sábado 27 de Julio de 2024, 07:05

NO PASARAN. Los vecinos de Nono, en Traslasierra, Córdoba, impidieron que se cumpla la orden judicial, mientras la mujer y sus hijos partía, por ahora, con paradero desconocido.



El drama de la restitución de dos niños de Traslasierra a Alemania, que ahora son buscados junto con su madre, sigue conmoviendo a esa región cordobesa. En una secuencia de sucesos con perfiles cinematográficos, los tres desparecieron mientras una pueblada, en la localidad de Nono, se producía frente a la vivienda que era allanada para llevarse a los menores.

Una sentencia de los Tribunales de Villa Dolores, de hace un año, decide que los niños deben vivir en Alemania, donde el padre los reclama, por considerar que ese lugar es su centro de vida. La decisión comenzó a ser cuestionada por Constanza T., la madre de los menores, quien cuenta con el apoyo de buena parte de la comunidad, que se ha manifestado insistentemente en los últimos días. Pero el fallo está firme y fue validado por el Tribunal Superior de Justicia de Córdoba y por la Corte Suprema, adonde la mujer acudió sin recibir respuestas positivas.

La joven madre afirmó que “no tiene garantías” de que en Europa se encuentre con lo prometido: una vivienda para ella y sus hijos, y los recursos económicos necesarios. El abogado de su ex marido, presente ayer en los Tribunales de Villa Dolores, aseguró: “Están todas las garantías”.

Entre la tarde del jueves y la madrugada del viernes, un “cordón humano” de vecinos rodeó la casa de la joven y sus niños, cerca del río Chico, de Nono. Cuando la Policía pudo entrar, a las 2 de la mañana, encontró que ahí no estaban las tres personas buscadas. Hars B., el ciudadano alemán que reclama a los niños, se encuentra en la zona. Tenía previsto viajar este sábado a Europa, para llevarse a los niños que nadie encuentra.

Analía Gallaratto, la fiscal de Villa Cura Brochero, confirmó que no había novedades sobre el paradero de la joven de 33 años y sus hijos de 10 y de 6 años.
La fiscalía lleva adelante una investigación por desaparición de personas, activando el protocolo respectivo.

Lucrecia T., hermana de Constanza, señaló: “El jueves, la abogada de Constanza presentó un habeas corpus para decretar inconstitucional la sentencia de la jueza Sandra Cugneo, que usó mal el Convenio de La Haya; ella viola los derechos de los niños, al progenitor nadie lo ha investigado, recién cuando comenzó su reclamo de los niños empezó a mandar una cuota alimentaria”.

Fabio Mastrangelo, abogado de Hars B. en Córdoba, afirmó: “Esta sentencia ha pasado por toda la arquitectura judicial argentina, y todos le han dado la razón al padre: los menores y su madre deben volver a Alemania, y es ahí donde ella debe plantear todo lo que le parezca, ante la Justicia alemana, donde seguramente será escuchada. Están todas las condiciones dadas para lo que se llama ‘regreso seguro’”.

Respecto de la desaparición de Constanza T. con sus niños, sentenció: “No tiene sentido negar una sentencia de la máxima instancia judicial del país, y es terrible, porque en el medio están los chicos”.

El letrado afirma que los niños, por intervención de la madre, no mantuvieron un plan de comunicaciones acordadas, y rescató que el padre envía en tiempo y forma su cuota alimentaria.

Mastrangelo destaca: “Estamos ante un papá que viaja 14 mil kilómetros para estar junto a sus hijos”. Y resaltó: “Ya se sabe que mi cliente no es el padre biológico de la niña mayor, pero nunca nos han notificado de que hubiera otro proceso respecto de ese tema”.

Se refiere a una causa de la Justicia federal en la que se investiga a ambos padres por el posible delito de supresión de identidad de la hija mayor de Constanza C.

Hars B. le había dado su apellido a la menor, quien es hoy legalmente su hija.

Una pueblada frente a la casa de Constanza, brigadas antidisturbios intimidando a los vecinos, un mediador de la Policía, funcionarios institucionales y judiciales, y un final inesperado. Lo sucedido entre el jueves y el viernes en Traslasierra se recordará por mucho tiempo.

En la mañana del jueves, una numerosa manifestación apoyó a la madre transerrana frente a los Tribunales de Villa Dolores, pero Constanza C. no estuvo en el lugar. Miembros de la Mesa de Derechos Humanos de Traslasierra y otras organizaciones defendieron los reclamos de la mujer. Como ella no había acudido a una citación judicial, en la que supuestamente debía entregarlos, se decidió allanar su casa.

Por la tarde, vecinos de la zona –la mayoría mujeres– formaron un cordón frente al domicilio de la joven en Nono. Como la resistencia de la gente se mantenía por la noche, se designó a un mediador. “Había una amiga de Constanza que entraba y salía diciendo que la chica estaba mal y que no podía hablar, cuando en realidad no estaba ahí”, dijo un testigo. Hacia las 2 de la mañana del viernes, miembros de la Justicia y la Policía pudieron entrar, para descubrir que en la vivienda no se encontraba la joven con sus niños.

En 2016, en Bolivia, Constanza (entonces de 25 años) y Hars B. (31) entablaron una relación. Ella tenía una niña de 3 años. Se casaron en Nono tiempo después y comenzaron su vida en Samaipata, cerca de Santa Cruz de la Sierra.

Los niños, que hoy tienen 10 y 6 años, crecieron en ese lugar, pero con prolongados períodos de tiempo en Nono y en distintos puntos de Alemania, adonde el padre se trasladaba por su trabajo. Antes de uno de los viajes a Europa, el hombre reconoció legalmente a la hija mayor de Constanza, con el acuerdo de esta. Después, la pareja se separó y él regresó a Alemania, donde se lo exigía su trabajo, según argumentó.

En mayo de 2023, Hars B. hizo su reclamo de reconstitución internacional de los niños. Constanza había regresado desde Bolivia hasta Nono a causa de la muerte de su madre. Los trámites la obligaron a permanecer en Traslasierra.

Cuando su exmarido inicia el litigio, la joven y los niños fueron obligados ya a no salir de Argentina. Supuestamente, los niños habían sido retirados de su centro de vida (en Bolivia) de manera ilegal. La causa fue tramitada en el Juzgado Civil de Villa Dolores.

El padre alemán fue defendido por una asesora letrada. El hombre argumentaba que sus hijos no tenían una atención adecuada en lo educativo y en lo sanitario, afirmaba que la madre ejercía una retención ilegítima de los chicos. No obstante, antes, el hombre había dejado un poder general a la madre para que pudieran moverse a cualquier parte del mundo hasta la mayoría de edad de los niños. Constanza T. aseguró que sufría violencia de género, que el padre no cuidaba a los niños y que era “un manipulador”.

En julio de 2023, la sentencia del caso decidió que los niños debían vivir en Alemania. El fallo le da a la madre la opción de viajar con ellos, y exige al padre brindar una vivienda para todos, además de los recursos económicos necesarios. Quienes critican la decisión afirman que la sentencia es dogmática y que no tiene “perspectiva de niñez”.
/La Voz