El día del cumpleaños de Atlético condenaron a Jazo Acevedo: en el juicio se ventilaron las relaciones de Mario Leito con barrabravas

Sábado 28 de Septiembre de 2024, 11:11

Jazo Acevedo y Mario Leito



Jorge Javier “Jazo” Acevedo fue condenado a un año y tres meses de prisión por amenazas contra un responsable de seguridad de Atlético Tucumán. Su abogado solicitó que no lo envíen a prisión, temiendo por su vida.

Durante todo el juicio, Acevedo mantuvo su versión, alegando que fue víctima de una causa armada para sacarlo del medio.

Después de escuchar la sentencia, Acevedo se dirigió a la víctima, el oficial Julio Bonkosky, y dijo: "Le quiero decir que no habrá represalias en contra de su persona o su familia". 

Acevedo, líder de "La 33", fue condenado a un año y seis meses por amenazar a Bonkosky, el segundo responsable de la seguridad de Atlético, durante un incidente el 27 de mayo tras un partido.

El fiscal Mariano Fernández había solicitado una condena de dos años y tres meses de prisión efectiva, mientras que la defensa pidió la absolución total o, al menos, el beneficio de la duda.

Antes de la sentencia, tanto la víctima como el acusado dieron sus declaraciones finales, aunque por separado, enviándose mensajes claros. Bonkosky afirmó: "Al miedo lo controlo, Jorge", y expresó que no tiene rencor hacia él, esperando que algún día puedan hablar sobre cómo hacer las cosas correctamente.

Acevedo, por su parte, manifestó temor de ser víctima de un montaje en el futuro: "Tengo miedo de que me incriminen en un homicidio", afirmó. "Soy inocente y me quieren muerto. Condenarme por un hecho que no cometí es una forma de hacerlo", concluyó.

El juez Guillermo Taylor sentenció a Acevedo el mismo día en que Atlético Tucumán celebraba su 122º aniversario, asegurando que la versión del hecho fue probada durante el juicio.

El abogado defensor Pedernera solicitó que Acevedo no fuera enviado al penal de Villa Urquiza, argumentando que durante los 11 años que su cliente estuvo detenido, sufrió múltiples castigos, incluyendo la pérdida de un ojo tras ser atacado por otro preso. El juez Taylor aclaró que esa decisión será tomada por un juez de Ejecución cuando la sentencia quede firme.

Durante el juicio salieron a la luz muchos aspectos de las relaciones entre la dirigencia encabezada por el presidente Mario Leito y los barrabravas:

Entradas: Por primera vez, un empleado de uno de los principales clubes de la provincia reconoció que los dirigentes entregan entradas de cortesía a los miembros de la barra brava. "Una de mis tareas era coordinar con ellos antes de los partidos para organizar el operativo de seguridad. En esos encuentros, me solicitaban entradas para que ingresaran los muchachos que traen las banderas y los bombos", explicó el oficial auxiliar, quien presta servicios en la división de Robos y Hurtos de la ex Brigada de Investigaciones. Asimismo, se mencionó que "Jazo" Acevedo habló sobre la venta de drogas dentro del estadio y las disputas internas por el control de "La Inimitable".

Bebidas: El testigo Bonkosky indicó que, cada vez que Atlético juega de local, una de sus responsabilidades es supervisar los accesos al estadio. "Los primeros en ingresar son los vendedores ambulantes, quienes son revisados para asegurarnos de que no entren con sustancias prohibidas. En estos controles también participan los inspectores del Instituto Provincial de Lucha contra el Alcoholismo (IPLA)", señaló. Sin embargo, no se abordó en profundidad cómo logran ingresar bebidas alcohólicas, como fernet y cerveza, que se venden dentro del estadio.

Interna: Bonkosky destacó que la facción más influyente de la barra brava es "La Inimitable", actualmente dividida en dos grupos en disputa: uno liderado por Gustavo “El Gordo” González y Julio Acevedo, y el otro por Walter “Chichilo” Acevedo. "Para evitar conflictos, se llegó a un acuerdo para alternar el control de la hinchada. Una fecha lo lidera uno de los grupos y la siguiente, el otro", explicó el oficial sin entrar en mayores detalles. Añadió que "Jazo" es el principal referente del grupo conocido como "La 33", quienes en el último partido contra Belgrano colgaron una bandera pidiendo la libertad de su líder. "Dado que muchos de los integrantes enfrentan problemas legales, se van turnando el liderazgo cuando alguno cae preso. Pero cuando recuperan la libertad, vuelven los conflictos", añadió.

Inconductas: El segundo al mando de la seguridad en el estadio "Monumental" admitió que "Jazo" comenzó a causar problemas desde el momento en que fue liberado. Aprovechando que Sergio "Chupete" Acevedo está encarcelado, se adueñó de los ingresos generados por la venta de bebidas en la tribuna Bolivia. "Varios agentes relataron cómo los insultaba y amenazaba cuando lo veían caminando por la calle Laprida. Siempre les dije lo mismo: hagan la denuncia en el momento, porque después ya no sirve", afirmó Bonkosky.

Extorsiones: El oficial también reveló un incidente dentro del plantel de Atlético que había sido mantenido en secreto. "No puedo confirmar que hubo denuncias formales, pero el club decidió implementar seguridad permanente y prohibir el acceso al Complejo Ojo de Agua para proteger a los jugadores", dijo. Según su testimonio, la barra comenzó a presionar a los futbolistas, exigiéndoles una suma de $2 millones para renovar los bombos y las banderas de la hinchada.