Luego, el referente del Frente Patria Grande cuestionó:
"A Fernanda Miño nunca le pudieron encontrar nada y ahora le inventaron que ella, que es la gran bandida del mundo, se robó una moto. Este allanamiento es por eso".
“Se piensan que somos boludos y vamos a creer que los dirigentes son tan diligentes que por el robo de una moto van a hacer un allanamiento a las diez y media de la noche”, agregó, sembrando aún más dudas sobre las razones del procedimiento.
En paralelo, apuntó contra los que, a su entender, fueron responsables de orquestar el operativo.
“Son nuestros enemigos que están cruzando una línea roja más. Son siempre cobardes con los de arriba y muy fuertes con los de abajo. Esto no se lo vamos a dejar pasar ni a perdonar, y vamos a llegar hasta las últimas consecuencias", advirtió.
Según su versión, policías encapuchados sorprendieron a la exconcejal de San Isidro de manera violenta cuando ella abrió la puerta y luego le impidieron contactarse con su abogado. "Le pegaron mucho a Fernanda, la tiraron al piso, le pegaron a las niñas que están totalmente aterrorizados. Esto no queda así. No nos chupamos el dedo", apuntó.
En febrero de este año, una nota de Clarín reveló que el denominado FISU había registrado erogaciones por $ 130 millones sólo en viáticos y comisiones durante el año pasado.
El gobierno de Javier Milei puso entonces la mira sobre esa millonaria caja que estaba en manos de Miño, surgida de la villa La Cava y quien responde políticamente a Grabois.
Es que en 2019, cuando se hace cargo Grabois, el fondo fiduciario tenía 63 empleados, pero la planta creció exponencialmente y en 2023 terminaron trabajando allí 613 personas. /
Clarín