Jueves 08 de Mayo de 2025, 08:06
En una jornada marcada por la tensión y la decepción de gran parte de la ciudadanía, el Senado de la Nación rechazó el proyecto de Ley de Ficha Limpia, una iniciativa que buscaba impedir que personas con condena judicial en segunda instancia por delitos contra la administración pública pudieran postularse a cargos electivos. El proyecto obtuvo 36 votos a favor, apenas uno menos de los 37 necesarios para su aprobación, y fue rechazado.
Pero más allá del resultado, lo que generó mayor indignación fue la reacción de la senadora Alicia Kirchner, quien protagonizó una escena de celebración en el recinto, abrazándose con sus compañeras de bloque y sonriendo ampliamente ante el fracaso de la propuesta. La imagen del festejo recorrió las redes sociales y despertó duras críticas, incluso desde sectores moderados, que esperaban una mínima muestra de respeto hacia el espíritu del proyecto, orientado a elevar los estándares éticos de la política argentina.
Hermana del fallecido expresidente Néstor Kirchner, Alicia Kirchner no ocultó su satisfacción por el resultado. Horas antes ya había dejado clara su postura en redes sociales, al afirmar que “con el proyecto de Ficha Limpia buscan la judicialización de la política y la proscripción a su gusto de candidatos”. Una defensa tácita a las aspiraciones electorales de Cristina Fernández de Kirchner, quien acumula condenas judiciales y fue una de las principales afectadas por el alcance del proyecto.
La ley buscaba impedir candidaturas de personas condenadas por delitos como cohecho, malversación de fondos públicos, enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias y negociaciones incompatibles, entre otros. Para muchos ciudadanos, el rechazo del proyecto representó un retroceso en la lucha contra la corrupción, y el festejo de Kirchner se percibió como un gesto insensible y provocador.
Desde la oposición, las reacciones fueron inmediatas. La Libertad Avanza compartió el video del festejo de Alicia Kirchner con un mensaje contundente: “Cuando ellos festejan, es que los argentinos de bien estamos perdiendo”. El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, también se sumó: “Ahí los tienen festejando. Ya saben a quién no votar en cada elección”.
Para el oficialismo, el resultado fue una victoria política en clave electoral: el kirchnerismo logró frenar un proyecto que muchos interpretan como un obstáculo para el regreso de Cristina Kirchner a la arena política. Pero el costo institucional y simbólico del rechazo —y sobre todo del festejo— parece más alto de lo que el bloque gobernante admite.
Si festeja Alicia Kirchner es porque le va mal al país y a los argentinos.... #FichaLimpia pic.twitter.com/n5XvZKegSh
— Santiago Claidermann (@SantiClai) May 8, 2025