Activistas de Greenpeace roban la estatua de cera de Macron de un museo, para protestar frente a la embajada de Rusia en París

Lunes 02 de Junio de 2025, 12:40

Activistas de Greenpeace robaron la escultura del popular museo Grévin.



Varios activistas de Greenpeace robaron este lunes la estatua de cera del presidente francés, Emmanuel Macron, del popular museo Grévin de París para ponerla ante la embajada de Rusia como protesta.

La sonriente estatua del presidente se ubicó junto a una pancarta con el lema "Ucrania se quema, el negocio continúa" para protestar contra las exportaciones de gas y fertilizantes desde Rusia, constató un periodista de AFP.

"Macron encarna este doble discurso: apoya a Ucrania pero alienta a las empresas francesas a seguir comerciando con Rusia", declaró Jean-Francois Julliard, director general de Greenpeace Francia.

Cómo fue el robo de la estatua de Macron

Horas antes, dos mujeres y un hombre entraron en el museo parisino haciéndose pasar por turistas y, tras cambiarse de ropa para parecer empleados, robaron la estatua, indicó una fuente policial.

Los activistas lograron sacar la estatua, estimada en unos 40.000 euros (45.670 dólares), por una salida de emergencia, tras ocultarla bajo una manta, agregó esta fuente.

El Museo Grévin es un museo de cera ubicado en París, famoso por sus figuras de personajes famosos de la historia, política, cultura y entretenimiento. La estatua de cera de Emmanuel Macron es una de las muchas que se exhiben,

Greenpeace es una organización ambientalista internacional fundada en 1971 en Canadá, conocida por sus acciones directas y a menudo dramáticas para llamar la atención sobre problemas ambientales.

Sus campañas abarcan desde la protección de los océanos y las selvas hasta la lucha contra el cambio climático y la energía nuclear. En este caso, el activismo se centra en la protesta contra las políticas energéticas relacionadas con Rusia.

Desde la invasión rusa a Ucrania en 2022, ha habido un escrutinio internacional sobre las relaciones comerciales con Rusia, especialmente en el sector energético, que es una fuente importante de ingresos para Moscú. /Clarìn

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