El peso fiscal sobre los productos ya supera el 40% .
La pesada carga oculta de los precios: cada $ 1.000 que se pagan, $ 490 son impuestos
Jueves 07 de Agosto de 2025, 07:17
“Cada $1.000 que se pagan de un producto, entre $410 y $490 son de impuestos”. Con esa frase, Armando Farina, vicepresidente de la Cámara de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas, expuso el peso fiscal que, según el sector, arrastran los precios en góndola. El dirigente sostuvo que “hay que dejar de ver el tipo de cambio y empezar a analizar todo lo que está escondido detrás de un precio”. Farina detalló que entre los componentes más distorsivos se encuentran “los impuestos nacionales, el Impuesto al Cheque, Ingresos Brutos y las tasas municipales”, y planteó que el esquema actual no solo dificulta la previsibilidad sino que limita la capacidad del canal comercial para absorber los aumentos.
“Prácticamente ya no tenemos margen comercial para contener los precios”, afirmó en declaraciones a Radio Splendid. La advertencia llega en momentos donde las listas de precios muestran subas de entre el 2% y el 8%, dependiendo el rubro. Cosmética, perfumería y limpieza encabezaron los aumentos —entre 5% y 8%—, mientras que los lácteos lo hicieron en menor medida: entre 2% y 3%. Aunque aclaró que aún no comenzaron a comprar mercadería con los nuevos precios, Farina señaló que están en “una etapa de negociación” con proveedores para “ver si logran conseguir algunos descuentos que amortigüen un poco los nuevos incrementos”.
Al analizar las causas detrás de las remarcaciones, el dirigente explicó que “el incremento se debe al ajuste de la materia prima” y puso el foco en el impacto de la devaluación. “Hubo una devaluación del 26% y los productos no subieron ese porcentaje. Hay que ver en cada producto qué incidencia del dólar tiene”, indicó. “Hay productos que son sensibles al dólar, por ejemplo el aceite: un 85% de lo que compone el precio es dolarizado por el insumo del girasol y la soja. Lo mismo pasa con el café y los electrodomésticos”, detalló.
El sector mayorista afirma que, con este nivel de presión fiscal y volatilidad de costos, sostener márgenes sin trasladar subas se vuelve inviable. Mientras tanto, las góndolas empiezan a reflejar una nueva ronda de aumentos en plena negociación. /BAE Negocios