Grave denuncia contra patovicas de La Santiago: golpearon a un hombre y le robaron el celular

Sábado 25 de Octubre de 2025, 05:25

LESIONES. Sergio Auvieux muestra las secuelas del ataque por el que denunció a los patovicas del boliche ubicado en Santiago y José Colombres, por cuyo paradero la Policía comenzó una pesquisa.



Un comerciante de 37 años denunció haber sido salvajemente agredido por personal de seguridad del boliche “La Santiago”, ubicado en pleno centro de San Miguel de Tucumán. Como resultado de la golpiza, sufrió una fractura en la muñeca izquierda que requerirá cirugía, además de múltiples heridas en rodillas, codos y rostro. La Unidad Fiscal de Decisión Temprana ya interviene para identificar a los responsables.

El violento episodio ocurrió el jueves cerca de las 5 de la madrugada, cuando Sergio Auvieux se encontraba en el local junto a dos amigas. Según su relato, todo comenzó cuando observó que su primo discutía con un empleado de la barra por un trago supuestamente mal servido. “Le reclamó que había pagado con vodka y sólo le dieron jugo”, explicó. Acto seguido —dijo— lo empujaron y lo sacaron del boliche.

Sergio se acercó para auxiliarlo, pero terminó siendo expulsado también. “Los patovas me dijeron: ‘¿Así que estás con él?’ y me sacaron”, declaró. La situación se agravó cuando intentó filmar lo ocurrido: uno de los guardias le habría arrebatado el celular y se negó a devolvérselo, lo que derivó en un forcejeo.

Mientras intentaba escapar hacia calle José Colombres, una moto interceptó su paso. Allí, según la denuncia, entre seis y ocho hombres lo redujeron en el piso, lo golpearon reiteradamente y le aplicaron maniobras de asfixia. También aseguró que le sustrajeron dinero, llaves y una cadena durante la agresión.

El ataque terminó recién con la llegada de un patrullero. “Cuando vieron el móvil policial me soltaron y quisieron simular que me estaban subiendo para controlarme”, señaló. Luego fue trasladado a la Comisaría 1ª, donde recibió asistencia y le recomendaron formalizar la denuncia, al advertir que “no era el primer episodio similar” vinculado al mismo local nocturno.

Auvieux manifestó preocupación por las consecuencias del ataque: “Voy a tener que operarme y no puedo trabajar ni cuidar a mis hijos. Pido que esto no quede impune y que me devuelvan el celular, que es una herramienta de trabajo”.

La Policía trabaja ahora en la individualización de los agresores, mientras la fiscalía recopila pruebas y analiza imágenes de cámaras de la zona. El caso quedó bajo investigación por lesiones graves, robo y posible abuso de autoridad privada en el marco de la seguridad nocturna.