Jueves 30 de Octubre de 2025, 08:57
Un millonario golpe al narcotráfico se registró este miércoles en Santiago del Estero, cuando Gendarmería Nacional secuestró seis kilos de cocaína de máxima pureza, que estaban escondidos dentro de dos gatos hidráulicos.Fuentes judiciales y de la mencionada fuerza, cercanas a la causa —que está a cargo del juez federal
Sebastián Argibay— indicaron que el procedimiento fue parte de un operativo que se inició semanas antes sobre la Ruta Nacional 34.
Según indicaron, el operativo se concretó a la altura de la localidad de La Tijera, en el departamento Banda, cuando los gendarmes realizaban control de rutina y allí detuvieron la marcha de dos camiones cisterna, que trasladaban combustible.
Uno de los rodados, ambos con banderas de Bolivia, iba cargado y el otro estaba vacío y según la explicación de su conductor debía cargar combustibles en Buenos Aires. Ante la sospechosa situación, requisaron ambos vehículos.
Así, los antinarcóticos detectaron que en el vehículo que iba vacío, dentro de la cabina había más de 20 kilos de cocaína, por lo que en ese momento, la Justicia Federal interviniente ordenó la detención de ambos conductores.Además, el juez Argibay dispuso el secuestro de ambos rodados. Con el correr de los días los conductores fueron procesados e indagados. Y, según la investigación judicial, con el avance de la causa se determinó que podría haber más sustancia oculta en los rodados.
Aparentemente, a través de las averiguaciones, se determinó que representantes de la firma del rodado pretendían arribar a suelo santiagueño para llevarse los vehículos. La premura por sacarlos del predio de Gendarmería —donde permanecen secuestrados— llamó la atención de los investigadores.
Los ojos de los antinarcóticos nuevamente se posaron sobre los rodados y sus sospechas se confirmaron cuando abrieron los crickets hidráulicos tipo "botella", que se encontraban dentro de las cajas de herramientas de uno de los ellos.Tras un minucioso control, los uniformados descubrieron que los dispositivos metálicos habían sido modificados para ocultar la sustancia estupefaciente. Luego de realizar las pruebas de campo correspondientes, se confirmó que se trataba de cocaína, con un peso total cercano a los seis kilos, valuados en más de 130.000.000 de pesos.
La imputación en contra de los acusados se agravaría en los próximos días cuando el Dr. Argibay, los interrogue nuevamente. /
El Liberal