Miércoles 03 de Diciembre de 2025, 10:08
La nena de 7 años fue encontrada sin vida en el río Lules en marzo, luego de que su madre intentara cruzarlo a pie durante la madrugada.La Justicia tucumana resolvió extender la investigación penal preparatoria y prolongar por tres meses la prisión preventiva de Daniela Fernanda Ávila (25), madre de Kiara Caro, la niña de 7 años hallada sin vida en el río Lules en marzo de este año. La mujer está imputada por abandono de persona seguido de muerte, agravado por el vínculo.
La decisión se tomó este martes 2 de diciembre, durante la sexta audiencia del proceso, luego de que el Ministerio Público Fiscal solicitara más tiempo para finalizar la acusación formal. De acuerdo con la Unidad Fiscal de Homicidios I, la investigación está prácticamente concluida, pero requiere un plazo adicional para elaborar la pieza acusatoria.
El auxiliar fiscal Lucas Maggio, en representación del fiscal Pedro Gallo, pidió una prórroga de 28 días para cerrar la etapa preparatoria y, además, la extensión de la prisión preventiva de Ávila.
La jueza interviniente hizo lugar al planteo, aunque amplió la investigación por 38 días, hasta el 12 de febrero de 2026 (sin computar la feria judicial de enero). También confirmó que la acusada seguirá detenida mientras se avanza hacia la etapa de juicio.

Kiara Caro fue encontrada sin vida en el río Lules el 2 de marzo, horas después de que su madre denunciara su desaparición. El hecho generó conmoción en la provincia, tanto por la edad de la víctima como por las circunstancias que rodearon su muerte.
Según la acusación fiscal, cerca de las 2 de la madrugada del 2 de marzo, Ávila se encontraba con su hija en los corsos del barrio Ex Ingenio Lules. De camino a la casa de su pareja, decidió acortar el trayecto cruzando por un camino de tierra hacia la zona conocida como “Puente Negro”.
Allí habría intentado cruzar a pie el río Lules, exponiendo a la niña a una situación de riesgo. De acuerdo con la investigación, Ávila atravesó el cauce sola, dejando a la menor en medio del río sin auxiliarla, pese a saber que no podía valerse por sí misma.
La niña terminó desamparada en el cauce, sufrió golpes en la cabeza, ingresó barro en sus vías respiratorias y murió por asfixia por sumersión.
Con la prórroga otorgada, la Fiscalía trabajará en el requerimiento de apertura a juicio oral y público, mientras Ávila permanece alojada en el servicio penitenciario. La causa avanza hacia su etapa definitoria, a nueve meses del hecho que estremeció a la comunidad de Lules.