Viernes 28 de Noviembre de 2025, 07:49

GRAVES LESIONES. La madre del detenido asegura que cuando se lo llevó la Policía, su hijo no presentaba ninguna de las lesiones por las que terminó internado.
La familia de Jonathan Alberto Parta, conocido como “Sayayín”, sostiene que las graves lesiones que hoy lo mantienen internado en el Hospital San Juan Bautista de Catamarca, no existían cuando efectivos de la Comisaría Sexta lo retiraron de su vivienda, el viernes 21. El hombre de 33 años ingresó al centro de salud con una doble fractura de mandíbula y la boca suturada internamente con alambres, según relató su madre, Norma, quien asegura que teme por su vida ante posibles complicaciones respiratorias.
La mujer explicó que fue ella quien pidió la intervención policial esa tarde, aunque aclaró que el episodio en el domicilio no respondió a un caso de violencia intrafamiliar. Contó que su hijo, bajo los efectos de las drogas, irrumpió alterado en la casa, golpeó muebles y rompió objetos. Uno de los hermanos intentó frenarlo y terminó forcejeando con él antes de que lo redujeran para entregarlo al personal policial.
Parta, dijo la familia, salió de su hogar sin lesiones visibles. Sin embargo, horas más tarde fue trasladado desde la comisaría al hospital con el rostro severamente lesionado. “Salió llorando del quirófano. Le colocaron alambres por dentro de la boca. Estamos desesperados por su estado”, afirmó su madre.
Norma enfatizó que su hijo atraviesa desde la adolescencia un consumo problemático de drogas que la familia no puede contener sola. “Cuando recupera la lucidez llora porque sabe que no puede manejar su adicción. Necesitamos ayuda, él la pide”, expresó. Aun así, remarcó que, pese a su enfermedad, Jonathan “no es un chico dañoso” y que, si bien tiene una causa judicial vinculada a un robo, “no anda asaltando ni haciendo daño”.
El relato familiar agrava las sospechas sobre lo ocurrido durante el tiempo en que Parta permaneció bajo custodia policial. Según la madre, cuando pudo hablar en el hospital, el joven le afirmó que al menos un agente lo golpeó dentro de la comisaría. “Me dijo que lo tiraron al piso y que vio un borceguí sobre su cabeza mientras lo obligaban a lamer el piso manchado con su sangre”, relató con angustia. Las fracturas que presenta —según los médicos— requerirán múltiples intervenciones quirúrgicas.
La familia señaló que no recibió asistencia de ningún organismo estatal y que carece de recursos para asumir una querella particular en el expediente, que quedó en manos del fiscal de Instrucción N°6, Facundo Barros Jorrat. “Es muy difícil enfrentar esto cuando del otro lado está todo el peso del Estado. Lo único que pedimos es que se investigue. Él estaba bien cuando se lo llevaron”, insistió Norma.
El caso abre una nueva controversia en torno a procedimientos policiales y coloca bajo escrutinio el accionar de la Comisaría Sexta. Mientras continúan las actuaciones judiciales, la familia espera respuestas y teme que la situación de Jonathan se agrave en las próximas horas.
Más leídas hoy
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
Más leídas en la semana
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10