De terror: así son los colectivos que usan los santiagueños
Jueves 11 de Diciembre de 2025, 06:33
.jpg)
PELIGRO. La antigüedad y el pésimo estado de las unidades que circulan entre La Banda y Santiago del Estero genera temores y críticas entre los usuarios, rehenes de un servicio deficiente.El sistema de transporte urbano de La Banda, en Santiago del Estero, atraviesa una de las crisis más profundas de los últimos años. Con frecuencias cada vez más espaciadas, amenazas de paro por parte de los choferes, unidades en evidente deterioro y una nueva solicitud de aumento del boleto, el servicio muestra señales de colapso que afectan a miles de usuarios que dependen diariamente de los colectivos para trasladarse.
Las líneas 1, 2, 3 y 5 están bajo la órbita de la empresa El Decano, propiedad de Miguel Lladón, suegro del diputado provincial Facundo Pérez Carletti (Despierta Santiago). La Línea 6 es operada por MyF, del empresario Rodrigo Carrascosa, mientras que la Línea 4 corresponde a MAPO, de Mariano Páez.
Sin embargo, pese a la normativa municipal que obliga a licitar los corredores con aprobación del Concejo Deliberante, canon y plazo de concesión definidos, ninguna de estas firmas posee una concesión formal vigente. Todas funcionan a través de permisos renovados por decreto del Departamento Ejecutivo, un mecanismo discrecional que carece de controles legislativos y que expone la falta de reglas claras en la administración del servicio.
La situación se agrava en las líneas con mayor flujo de pasajeros —la 1 y la 6—, que son también las que acumulan más reclamos por demoras prolongadas, colectivos fuera de servicio y fallas mecánicas. En varios barrios, los usuarios denuncian esperas de entre 40 minutos y una hora, sin garantías de que el coche finalmente pase.
A la precariedad operativa se suma la conflictividad laboral. Los choferes amenazan con nuevas medidas de fuerza ante retrasos en los pagos, lo que mantiene en vilo a la comunidad. Paralelamente, las empresas insisten en aplicar un incremento tarifario que, en este contexto, genera inquietud entre los vecinos, quienes sienten que pagan más por un servicio cada vez más deficiente.
Otro punto crítico es la eliminación del boleto estudiantil gratuito, decisión tomada durante la gestión del intendente Roger Nediani. El beneficio alcanzaba a estudiantes de nivel inicial, primario, secundario y terciario —inclusive en contraturno— y representaba una herramienta fundamental para garantizar el acceso a la educación. Su eliminación impactó directamente en los hogares de menores ingresos, que hoy deben afrontar un gasto extra para asegurar la asistencia escolar de sus hijos.
Con un sistema que opera con flotas envejecidas, choferes disconformes, usuarios desprotegidos y empresas sin concesiones formalizadas, La Banda enfrenta un escenario alarmante. La falta de supervisión institucional por parte del área que encabeza Romano Norris y la ausencia de una planificación integral profundizan la crisis de un servicio público esencial que reclama, con urgencia, una reestructuración profunda y transparente.
Más leídas hoy
Más leídas en la semana
