Sábado 01 de Diciembre de 2018, 14:42
Siempre diosa, siempre activa y siempre yendo por más.
En medio de una agenda que incluye compromisos laborales, personales y, sobre todo, tiempo para dedicarse a su rol de madre y esposa, la conductora de América se hace un lugarcito para hacer deporte y llegar diez puntos al verano. Lejos de las rutinas de aparatos en el gimnasio, o de los personal trainers, Pamela David (40) buscó la manera de combinar actividad física, aire libre y diversión saliendo a patinar en rollers por el Rosedal de Palermo. Cada vez que puede, la sensual morocha recorre el parque andando durante más de una hora demostrando destreza… y que la tiene re clara.
“Empecé patín porque odio el gimnasio. Todo lo que intenté ir, y nada. Esta es la primera vez que me engancho con algo. Patinaba de joven, y antes de que naciera Felipe dejé de hacerlo. Así que estoy poniéndome otra vez, para acordarme cómo era y sacarme los miedos que te genera al ser más grande. Patino porque me entretiene, hago gimnasia sin darme cuenta al aire libre y me estoy sintiendo mejor después de patinar que antes, cuando no lo hacía”, explica la esposa de
Daniel Vila, quien siempre se mantiene bella y en forma.
Andando, por la vida girando. Afortunada en el trabajo y en el amor, luego de un difícil momento familiar que les tocó atravesar, David le pone el pecho a la vida, y mientras está a full con el deporte, agradecida a Dios, cuenta:
“Fue un año durísimo en lo personal, afrontando desafíos que te ponen a prueba, pero gracias a Dios salió todo perfecto. Y un año que nunca me voy a olvidar, porque el programa ganó un Martín Fierro al Mejor magazine, pero que siempre soñamos y deseamos tanto. Así que se nos dio. Ha sido un año para no olvidarme, a pesar de que después vino todo lo otro y realmente importante de la vida”.