Había empezado un poco díscolo y rebelde dentro del Servicio Penitenciario Federal luego de que la PFA lo arrestó el viernes pasado en la casa de su padre, empresario de los juegos de azar, en un barrio cerrado de Canning para trasladarlo a la alcaidía de Tribunales donde fue indagado en el Juzgado Nº 48 por el juez Carlos Bruniard. Eguillor se negaba a que los penitenciarios de uniforme gris lo esposaran. "No me toques", repetía, se negaba también a que le hagan una simple pericia médica.
: que Eguillor esté en una unidad de presuntos delincuentes sexuales es resguardo suficiente, un diseño de población hecho por el Servicio Penitenciario Federal para evitar peleas entre detenidos.
Hubo rumores tribunalicios en las últimas semanas que indicaban que Eguillor habría recibido un diagnóstico de un desorden psiquiátrico en algún punto de su vida, precisamente en su último año del colegio secundario y que su madre incluso comenzó un expediente por medidas precautorias en un juzgado de familia de Lomas de Zamora, algo que la fiscal Martínez Castro se negó a confirmar o desmentir ante la consulta de Infobae.
Sin embargo, fuentes cercanas al expediente que lo investiga por violación desestiman esta versión. Si hubiera sospechas de una condición psiquiátrica, Eguillor debería haber sido derivado al programa PRISMA, la unidad de salud mental del SPF a la que fue enviado, por ejemplo, "Pity" Álvarez, tras matar de tres balazos a un hombre en el barrio Samoré de Villa Lugano, y Patricio Santos Fontanet, cantante de Callejeros.
El juez Bruniard, por otra parte, consideró que no debía dejarlo libre, que su libertad implicaba un obvio riesgo de fuga. El magistrado rechazó un pedido de excarcelación presentado por el defensor oficial de Eguillor ya que considera que tiene los medios suficientes como para fugarse de acuerdo a información publicada por Télam.
En algún momento del año próximo, Eguillor será juzgado en el Tribunal Oral Criminal Nº 9 por otro caso de abuso, otro presunto ataque, esta vez sin acceso carnal, un tocamiento a una empleada del Casino de Buenos Aires, madre y abuela, ocurrido en abril de 2016 en el estacionamiento del lugar. "Venía caminando con el pene afuera", aseguró la denuncia original en su contra.