El médico que golpeó a su ex esposa y lastimó a su hija dijo ser una víctima inocente, pero nadie le creyó

Sábado 18 de Marzo de 2023, 06:56

AUDIENCIA. Luego de su argumentación en la que intentó victimizarse, el médico golpeador se enteró que pasará otros 30 días detenido.



“Señoría, como le dije la primera vez, soy totalmente inocente. Soy la víctima de este hecho, me han pegado en el suelo, pedí ayuda. Hay una falta de respeto y de lealtad de parte de mi ex mujer por usar a mis hijos para acusarme de algo que no hice”, expresó el médico traumatólogo L.F.A en la audiencia que se realizó en su contra, por estar acusado de agredir a su ex esposa y a su hija, el pasado 12 de febrero. Pero la jueza interviniente no creyó en su versión y le prorrogó por 30 días más la prisión preventiva.

Durante el debate, el auxiliar Alejandro Nadir, siguiendo instrucciones del fiscal Gerardo Salas, anunció que agravaría la imputación contra el detenido. Solicitó que pase de lesiones leves a lesiones agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género (por la agresión a su ex pareja) y por lesiones leves agravadas por el vínculo (por el ataque contra su hija).

Al justificar el planteo, Nadir informó que se les realizó a ambas víctimas un segundo examen médico. Los médicos Javier De Moreno y Rodolfo Lobo constataron que la ex pareja del acusado “todavía no se encuentra curada y está ante un trastorno por estrés postraumático crónico y grave que requiere tratamiento con psicofármacos y psicológico”.

El auxiliar solicitó la extensión de la prisión preventiva por 30 días, ya que consideró que el imputado puede obstaculizar la investigación presionando a las víctimas o a los otros testigos que aún deben declarar.

La querella, representada por Manuel Pedernera, adhirieron al planteo. No pasó lo mismo con el defensor del acusado. “Existen varias medidas que pueden tener la misma efectividad para evitar el riesgo procesal y que pueden no interferir con la salud de mi defendido”, señaló César Marcelo Cisnteros.

El profesional hizo especial hincapié al sostener que el acusado presenta problemas de salud tanto psicológicos como cardíacos, por lo que propuso la medida de arresto domiciliario.
El fundamento principal que expuso fue que en la dependencia donde se encuentra alojado no puede conciliar el sueño debido al ruido que hacen los otros detenidos y que eso afectaría su condición de salud. También dijo que los oficiales a cargo no le proporcionaban su medicación en el horario indicado por el personal médico.

“En la cámara Gesell mi hija repitió lo que textualmente le grabó en la cabeza su madre y su tío, que es abogado”, dijo el acusasdo. Al respecto L.F.A., ex pareja del imputado, señaló que “hacer pensar que su propia madre la esté usando a su hija para decir que lo quiero dañar, me llena de angustia. Decir que le quise dañar y deformar el rostro, cuando durante años hemos luchado codo a codo para sacarla adelante por el labio leporino con el que nació, es propio de una persona psicótica. No quiero agregar nada más porque me quiebro”, declaró.

Luego la víctima, con permiso de la jueza Isabel de los Ángeles Méndez, también explicó su punto de vista sobre la situación de salud de su ex pareja “Su Señoría, como médica clínica afirmó que al tratamiento médico lo puede cumplir en cualquier penal porque sólo es tomar medicación; y a la psicoterapia se la puede hacer tranquilamente por videollamada como se inició en la pandemia. Así como su depresión vale, el miedo de nosotras también”, destacó.

Por último dijo que su hija no fue influenciada por nadie y que los informes psicológicos realizados por su colegio con anterioridad, y puestos a disposición, lo comprueban.

Antes de informar su decisión, la jueza dijo que “hasta ahora las medidas que se han realizado siguen comprometiendo al acusado; ninguna de ellas ha dado un resultado a favor de una versión distinta del caso expuesto”.

Méndez rechazó el pedido defensivo porque consideró que existe el riesgo de que el acusado pueda comunicarse, tanto con la víctima como con los testigos que faltan declarar, e influir en sus testimonios y en la investigación. Recalcó que no se presentó ninguna información que avale que los problemas de salud le impidan estar alojado en un calabozo común.

Méndez aceptó el cambio de imputación y la prórroga de 30 días de prisión preventiva. También ordenó que sea trasladado al penal de Villa Urquiza. “El derecho a la salud en personas alojadas en dependencias policiales sí está garantizado. Caso contrario, deberá tomarse cartas en el asunto”, falló la magistrada.

Pedernera, luego de haber terminado la audiencia, dijo que por el momento coincidirá con la calificación legal que tiene el caso, pero insiste en que en próximas instancias la causa debería ser caratulada como tentativa de homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género.

“El acusado es una persona violenta. Él estaba agrediendo salvajemente a su ex esposa, frenó su accionar porque su hija intervino en la situación tirándole un vaso de vidrio, de lo contrario la historia podría haber sido otra”, afirmó.