Se juegan la libertad y hasta la vida por monedas trayendo droga a Tucumán

Lunes 15 de Abril de 2024, 07:43

SECUESTRO. La droga era traída por "mulas" que, se cree, a su vez eran controladas por otros empleados de los cárteles norteños que producen droga a gran escala.



Los datos oficiales confirmaron el decomiso de más de 31 kilos de drogas, entre marihuana y cocaína, pero el hallazgo escondía otros datos cruciales, como el hecho de que los narcos mantienen la modalidad de comprometer a personas de escasos recursos para trasladar los estupefacientes, además del dato no menor de su origen.

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Efectivos de Didrop Norte realizaban controles preventivos, en el marco del Operativo Lapacho, en el puesto limítrofe de Cabo Vallejos, en la ruta 9, al norte de la provincia, cuando alrededor de las 10 detuvieron a un ómnibus de línea que había salido de la ciudad salteña de Metán y ten{ia como destino la terminal de El Bajo.

Los uniformados, bajo las órdenes del oficial Ramón Racedo y los comisarios Ariel Santillán, Jorge Mostafá y Jorge Nacusse, requisaron las bodegas del micro. Después de encontrar la droga en dos valijas, identificaron a sus dueños.

Fuentes policiales y judiciales detallaron que los sospechosos podrían haber sido contratados por los verdaderos narcos para que se hagan cargo del envío. “Les habrían pagado $ 100.000 para que trajeran todo a la capital. Ellos se dirigían a la terminal y allí la entregarían a su dueño”, resaltron.



Los pesquisas no ordenaron que el micro continuara viaje para detener a los dueños de la carga ante la sospecha de que habrían utilizado otras personas para vigilar a las "mulas". “Ellos seguramente sabían que secuestramos la sustancia”, indicó.

Para los investigadores no hay duda de que la cocaína tenía el sello de un delfín; Reinaldo Delfín Castedo, conocido en el ambiente como “El Patrón del mal”, este narco de origen salteño está detenido cumpliendo condena por tráfico de droga y por homicidio en una cárcel federal de Buenos Aires, quien pese a los esfuerzos de la justicia, sigue operando desde su lugar de detención.

La marihuana también tenía un sello: el de una calavera, pero hasta el momento no está claro de quién es ese distintivo. Usar logos es característico de los grandes grupos narcos. Los colocan para determinar quién la produce y cuál es su calidad.

El operativo confirma que en Bolivia y en el norte argentino, cárteles de droga están produciendo marihuana a gran escala. 

“En lo que llega de Paraguay, donde se produce la mayor cantidad de esta sustancia, los envoltorios son rectangulares. Hemos secuestrado grandes cantidades en envoltorios que son muy similares a los de las hojas de coca que son circulares, pero mucho más amorfos”, afirmó una fuente. 

Entre noviembre y el 25 de marzo, el Operativo Lapacho permitió que se incautaran 34 kilos de esta droga ilegal.