Quién es el Capo Willy, el jubilado cool que da consejos amorosos en las redes
Lunes 06 de Mayo de 2024, 21:52
Es hincha fanático de Racing y su sueño es conocer a Guillermo Francella y grabar un vídeo con él. "¿Me entendés, mens?" ya es una marca registrada y su cuenta de Instagram suma fanáticos día a día.El Capo Willy es el compañero perfecto para aquellos que buscan pareja o intentan superar desamores. Muchos lo consideran un psicólogo influencer, pero él asegura haber estudiado en la "universidad de la calle".
"Mi vida fue siempre un chamuyo", afirma Willy que sustenta su personalidad y el contenido de sus vídeos a base de vivencias personales callejeras. Trabajó más de 40 años vendiendo productos de sastrería sin tener un local físico y considera que ese es uno de los tantos factores que lo convirtieron en quien es hoy.
A Willy siempre se lo ve bien vestido porque le encanta "estar a la moda". Con un arito juvenil en la oreja y un buzo anaranjado o con camisas floreadas propias de esta generación, el influencer recomienda a sus seguidores cómo manejarse cuando quieren conquistar (u olvidar) a alguien.
Nació y vivió toda su vida en el partido bonaerense de Avellaneda. Es hincha fanático de Racing Club, como Guillermo Francella, con quien se identifica y siente tener rasgos similares a la hora de expresarse.
Willy comenzó a subir vídeos hace tres meses y ya tiene más de 500 mil seguidores en Instagram.
"Hacer un vídeo con Francella sería una satisfacción personal tremenda. Me encantaría conocerlo", cuenta Willy y recuerda que en los años 90 se lo cruzó en un semáforo entre Santa Fe y Callao y se quedaron mirando. En ese entonces, ambos con bigotes y pelo negro. "Estoy seguro que habrá pensado que yo era igual a él", agrega.
"¿Me entendés, mens?", suelta Willy cada vez que termina de explicar algo. Y no solo en sus vídeos repite esa frase con ese carisma tan peculiar, sino que ya parece incorporarla en su cotidianidad y poco a poco se convierte en una marca registrada.
El Capo Willy y sus consejos para el amor
En su biografía de Instagram se define mejor que nadie: "Me gusta tirar frases que vi por ahí, dar consejos, hacerme el que sé, escuchar temazos y hacer asado". Es que su personaje y su reconocido latiguillo nacieron en un asado entre amigos luego de contar unas anécdotas.
De inmediato, los otros comensales le sugirieron que se dedicara a crear contenido para redes sociales. "Mis tres amigos presentes ese día son quienes trabajan conmigo para idear, filmar y editar los vídeos", explica.
En muy poco tiempo, la cuenta de Instagram de Willy superó los 500 mil seguidores y desde su primer vídeo recibe likes y comentarios positivos que lo motivan día a día. Su familia es un pilar importante que lo sigue de cerca y consume su contenido. "Ellos se ríen mucho conmigo. Nos apoyamos mutuamente desde el primer día", comenta.
Hoy está felizmente casado con una mujer con la que vivió mucho tiempo. Uno de sus pasatiempos preferidos como pareja es ir al restobar Mi Club de Banfield, lugar que Willy considera un templo y que frecuenta casi una vez por mes para no perder eso de "bailar toda la noche".
Manténganse en "bajo perfil" un ratito, pongan ciertos límites, y verán que el "El Capo Willy" tiene razón en lo que dice. pic.twitter.com/v33291pTlA
— Eduardo Salazar (@lalosalazare) February 16, 2024
Mientras conversa, dice frases como si estuviera en un vídeo en vivo: "Los hombres creemos que nos levantamos a las mujeres, pero en realidad son ellas las que nos eligen a nosotros". El creador de contenido ratifica entre risas haber tenido "muchas novias" y que incluso hasta le "tiraron ladrillos en el auto".
Al convertirse en un guía para muchas personas que consumen sus vídeos, suele recibir pedidos de consejos personalizados, pero prefiere no contestarlos. "Un muchacho me escribió un testamento sobre cómo solucionar los problemas con su novia, pero si les respondo a todos, me vuelvo loco. Como no soy psicólogo, no me caliento", exclama entre carcajadas.
Él prefiere no pensar en el futuro de su proyecto, sino vivir el presente. "No soy un profesional en esto, para mi es un pasatiempo aunque me gusta mucho como me está yendo", remarca.
Willy está haciendo canjes con negocios de ropa porque le gusta "estar a la moda"
El Capo Willy no se asusta con las cámaras
Al Capo Willy se le dio fácil hablar frente a las cámaras, es que desde chico estuvo en contacto con el mundo audiovisual. Cuando le tocó hacer el Servicio Militar Obligatorio "zafó" del ejercicio físico por saber de operación de cine. Ese año en vez de hacer trabajo forzoso, se dedicó a proyectar películas y vídeos con instrucciones militares en el regimiento.
En su juventud, invirtió en una Panasonic 8000, filmadora con la que capturó momentos familiares durante años. "Era una cámara de televisión y la llevaba a todos lados. Tuve contacto con lo audiovisual toda mi vida", relata.
"Si te tiran un like en redes, le interesás. Si te comentan, ahí si te están dando bola", analiza el influencer. Si bien Willy en sus vídeos habla sobre la forma de vincularse en la modernidad, su época preferida fue entre los años 80 y el 2000.
Esa franja temporal significó mucho para él. La forma de vestirse, las películas, las canciones de Babasónicos, Virus, Auténticos Decadentes y Soda Stereo y por sobre todas las cosas, la forma de vincularse con el otro. "Hoy es todo igual, todo el tiempo", analiza.
"Siempre respeté todas las épocas pero en ese entonces, conquistar a alguien tenía una mística distinta. Costaba mucho más, estabas un mes y medio enganchado hasta que se te daba. En la actualidad se perdió el romanticismo", agrega.
Willy se adaptó perfectamente a las nuevas generaciones y supo identificar los códigos para relacionarse a través de las nuevas tecnologías. A pesar de eso, es y será un fiel defensor del "cara a cara" y de no perder la "magia" cuando uno se enamora. /Clarin
Esa franja temporal significó mucho para él. La forma de vestirse, las películas, las canciones de Babasónicos, Virus, Auténticos Decadentes y Soda Stereo y por sobre todas las cosas, la forma de vincularse con el otro. "Hoy es todo igual, todo el tiempo", analiza.
"Siempre respeté todas las épocas pero en ese entonces, conquistar a alguien tenía una mística distinta. Costaba mucho más, estabas un mes y medio enganchado hasta que se te daba. En la actualidad se perdió el romanticismo", agrega.
Willy se adaptó perfectamente a las nuevas generaciones y supo identificar los códigos para relacionarse a través de las nuevas tecnologías. A pesar de eso, es y será un fiel defensor del "cara a cara" y de no perder la "magia" cuando uno se enamora. /Clarin
Más leídas hoy
Más leídas en la semana
