Martes 22 de Octubre de 2024, 07:52
Un albañil del barrio San Francisco de la ciudad santiagueña de Quimilí, junto a su pareja se trasladó hasta el barrio San José de Calasanz para asistir a un casamiento.Llegaron en una motocicleta Motomel, de 110 centímetros cúbicos, que estacionó afuera de donde se celebraba la boda, con todas las medidas de seguridad.
Alrededor de las 3.30, el albañil salió para “vigilar” el rodado y advirtió que ya no estaba. El damnificado realizó un recorrido por las inmediaciones, pero no encontró indicios de la moto.
Finalmente alertó a la Policía y realizó la denuncia en la Comisaría Comunitaria Nº 29.
El hecho generó la intervención de
Jacqueline Macció, representante de la Unidad Fiscal de Delitos Comunes, quien
ordenó que personal de Robos y Hurtos se hiciera cargo de la investigación.Horas después, al llegar la mañana, en medio de las averiguaciones, los policías tomaron conocimiento del hallazgo de una moto abandonada en una zona montuosa del barrio Cooperativa.
En efecto, los uniformados comprobaron que el rodado estaba totalmente desmantelado.
A través de los números de cuadro y motor se determinó que era el vehículo que se había robado a uno de los invitados de un casamiento.
Lo que quedó de la moto fue trasladado a la dependencia policial y se prosiguen con las investigaciones para identificar a los sujetos que hurtaron la moto y le sacaron varias partes para ser vendidas como repuestos o para armar otra. /
Nuevo Diario