Mucho interés por la Argentina de Milei: las marcas internacionales que llegarán pronto al país

Miércoles 05 de Marzo de 2025, 10:32

Impulsadas por un dólar barato y la apertura comercial, firmas como Decathlon, Polo Ralph Lauren y ON preparan su desembarco.



Las marcas extranjeras retoman su interés en Argentina. Impulsadas por un contexto de mayor estabilidad, la apertura de importaciones, un dólar más accesible y la reducción de la inflación, grandes cadenas de diversos sectores están avanzando en sus planes para ingresar al país.

La entrada de marcas internacionales a Argentina suele darse mediante socios locales o operadores de franquicias regionales, quienes cuentan con experiencia y un sólido conocimiento del mercado.


El listado incluye desde cadenas gastronómicas hasta firmas de indumentaria, artículos deportivos y cosmética, entre otros rubros.

Decathlon, Polo Ralph Lauren y ON: Las Marcas Más Esperadas

En una nota en LN, Alfredo Sainz y Laura Ponasso alimentan la expectativa de las marcas que se vienen.

Entre las que ya hicieron pública su decisión de llegar a la Argentina, una de las más convocantes es Decathlon. En realidad, sería un regreso, ya que la marca francesa tuvo una fugaz incursión en el país a fines de los ’90. Ahora, la temporada 2 de la empresa que se dedica a la indumentaria deportiva y las actividades al aire libre en general,  será de la mano de una sociedad llamada Grupo One, integrada por el empresario argentino Manuel Antelo y el matrimonio de Sabine Mulliez y Pedro Aguirre Saravia.


Mulliez es una de las herederas del imperio Mulliez, una de las familias más acaudaladas de Francia, que está casada con Aguirre Saravia, un argentino que durante 15 años trabajó en el Citibank, en la Argentina y en Nueva York, con mucha experiencia en el manejo de fondos privados de inversión. La intención de los socios, dicen desde LN, es traer al país otras marcas que también son controladas por la familia Mulliez, como Kiabi (indumentaria informal) y Naterial (muebles).

En el rubro deportivo, más estrictamente de calzado, se espera la llegada formal de ON, la marca suiza de zapatilllas que tiene entre sus dueños a Roger Federer y que en el último tiempo convirtió en la mayor pesadilla de Nike y Adidas en el mercado del running.

La llegada se concretará a través de un distribuidor.

La firma BISA, que ya opera con Under Armour en el mercado local, ahora acaba de sumar la licencia de ON. "De entrada vamos a estar enfocados en el calzado, con líneas de running y de uso diario, apuntando al segmento más alto de la pirámide", explicó Juan Ignacio Gauthier de BISA a LN.

La empresa tiene una planta de producción de indumentaria deportiva en Hurlingham pero, en un principio, toda la línea de ON que se venderá en el país será importada. Es probable que ON tenga su tienda propia y Palermo suena como el barrio ideal para eso.

En el segmento de lujo, muchas novedades

En el mercado del lujo, uno de los regresos más esperados es el de Polo Ralph Lauren. La marca creada por Ralph Lifshitz en 1967 se había en 2012 durante el segundo Gobierno de Cristina Kirchner, cuando se puso el cepo a las importaciones. Ahora,dice LN, en el mercado aseguran que la marca podría volver de la mano del grupo panameño Ebida, liderado por Alfredo Maduro, que ya tiene la licencia para varios mercados de la región.


El ingreso al país con un socio panameño no es algo nuevo. Según Sainz y Ponasso, este esquema ya fue adoptado por otras marcas internacionales como Bath & Body Works y Victoria’s Secret, que ya abrieron sus primeras tiendas en Unicenter, de la mano de Grupo David, dueños de las licencias para la región de más de 15 firmas internacionales, que suman 248 tiendas en 14 países, desde Guatemala hasta la Argentina, pasando por Aruba, Colombia, Costa Rica, Paraguay, Perú, Uruguay, Venezuela. "Tenemos dos marcas más del rubro textil, que creemos que pueden entrar perfectamente en el mercado. Ya estamos comenzando a ver locaciones, todo depende de cómo se den las negociaciones. Lo dirá el tiempo", explicaron desde Grupo David.

Otro inversor panameño que se encuentra muy activo a nivel local es el grupo Harari, uno de los principales holdings económicos de aque país, que primero se quedó con la operación de Nike en la Argentina y después le sumó la de Zara. En el mercado se asegura que ahora estarían sondeando el negocio para traer al país otras marcas del grupo Inditex (los dueños de Zara), como Massimo Dutti y Bershka.

En el segmento de lujo, otra de las marcas que suena en el mercado es la italiana Dolce & Gabbana, que tiene indumentaria, joyería, perfumería y cosmética. La avenida Alvear y el shopping Patio Bullrich aparecen como los spots más probables para el local de la marca.

A la lista de marcas de lujo que sostienen su interés por el país se suma también Gucci, que recientemente obtuvo el registro de marca en el Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual, trámite que había iniciado en 2022.

El segmento premium también registró movimientos recientes. En 2024, las marcas italianas Liu Jo, especializada en ropa y accesorios, y Furla, conocida por sus carteras de diseño, abrieron locales en Galerías Pacífico.

    A estas se sumó édition privée, un proyecto del grupo Beauty Group, que instaló su primera tienda en la exclusiva Avenida Alvear (donde funcionó Polo durante varios años) con una oferta de fragancias de autor.

Otras empresas aceleran y se expanden. En el segmento de moda y accesorios, Tommy Hilfiger y Calvin Klein avanzan con nuevas aperturas en distintos puntos del país. Calvin Klein, que volvió al mercado argentino en 2017 tras un período de dificultades, inauguró recientemente una tienda en el Córdoba Shopping mientras que Tommy Hilfiger, con locales en los principales shoppings de Buenos Aires, también busca expandirse hacia otras provincias.

La frances Chanel está en la misma. En alianza con la empresa Juleriaque, la casa francesa inauguró su segunda tienda en el país, ubicada en el Alcorta Shopping, sumándose a la que funciona en Galerías Pacífico desde 2016.

En paralelo, impulsada por un contexto más laxo para el comercio exterior, también la norteamericana Mail Boxes Etc, dedicada a soluciones de courier, logística, e-commerce, gráfica, impresión, anticipó su desembarco. "Fundada en 1980 y con presencia en más de 45 países, cortará las cintas de su centro piloto en el país en abril, de la mano de un grupo empresario conformado por: Globalexar y Rebuffo Comercio Exterior. El plan de expansión vía franquicias contempla la apertura de alrededor de 15 tiendas en los próximos tres años", señalan desde LN.

También regresan algunas brasileñas

Desde Brasil también hay otras marcas que ya tienen decidido su desembarco en el país. En algunos casos se trata de un regreso al país, como Osklen. La marca de moda fundada por el artista y diseñador Oskar Metsavaht había puesto un pie en el país en 2011 con la apertura en el shopping Patio Bullrich, apuntando a un segmento de consumidores de lujo.

Su regreso a la Argentina fue confirmada por fuentes del Grupo Dass, que se hizo con el control de Osklen a fines de 2022.


Otra marca brasileña que hizo públicos sus planes para volver al país es la de artículos deportivos Penalty.

    Roberto Estefano, presidente de Cambuci, fabricante de Penalty, anunció hace unos días que cerró un acuerdo con un distribuidor local para retomar su presencia en el mercado argentino. "El mercado de Argentina es enorme y tiene un déficit en la línea de productos que atendemos. Daría para facturar US$ 50 millones o US$60 millones tranquilamente", aseguró.

También Hering ya blanqueó sus intenciones de encontrar un socio local para concretar su retorno. El gigante brasileño tiene más de 748 tiendas físicas en Brasil, 677 franquicias y presencia en más de 10 países.

La lista de empresas brasileñas que se preparan para llegar a la Argentina incluye a Track & Field. Se trata de una marca de indumentaria deportiva nacida en San Pablo a fines de los ’80 y que hoy cuenta con 46 tiendas propias y más de 300 franquicias distribuidas en las principales ciudades brasileñas.

Otra marca que se anotó para llegar al país es Buddha Spa, una cadena de spas de lujo, especializada en experiencias de relajación, bienestar y rejuvenecimiento. Actualmente, según precisaron a La Nación, se encuentra en la búsqueda de un master franquiciado que se comprometa con la apertura de entre tres y cinco locales en el plazo de cinco años, a la calle y en centros comerciales, aunque no descartan la alternativa de llegar vía directa con un local para finales de este año.

En el mercado de la construcción, resalta Casa do Construtor, firma de materiales y artículos para el hogar. Fundada en 1993 en San Pablo, la compañía trabaja con un sistema de franquicias, con más de 800 locales en Brasil, siete en Paraguay y tres tiendas en Uruguay, a las que ahora se sumará la primera en la Argentina. Su primera sucursal será en la localidad de Tigre y cortarán cintas en mayo.

Y en gastronomía, la lista es larga

El rubro gastronómico es otro de los que más seduce a las marcas internacionales. Los dueños de la licencia de la empresa colombiana Juan Valdez ya confirmaron sus planes para abrir antes de fin de año la primera tienda de 100 Montaditos, una cadena de tapas nacida en España hace 25 años y que en la actualidad cuenta con más de 400 locales, repartidos en su país de origen, Estados Unidos, México, Italia, República Dominicana, Panamá y Portugal. "Estamos acelerando los plazos para llegar con la apertura del primer local de 100 Montaditos en Buenos Aires en el tercer trimestre de este año y lo más probable es que sea un shopping", explicó Sebastián Ríos, principal socio del Grupo RE, los dueños de la cadena Almacén de Pizzas y de la licencia de Juan Valdez

Y si se dice que volvieron los ’90 a la política, no pueden no volver Pizza Hut y Domino’s Pizza.


Pizza Hut ya hizo pública su decisión de volver al país e inició negociaciones con potenciales inversores locales.

A pesar de su éxito en diferentes países de la región, la marca fracasó dos veces en la Argentina: primero en los ’80 y luego en los ’90, cuando llegó a abrir 20 sucursales con el fondo de inversión The Exxel Group. En ambos casos, la cadena no pudo hacer frente a las pizzerías tradicionales y lo que a priori parecía ser su principal diferencial (el servicio de delivery) rápidamente fue replicada por la mayoría de las casas porteñas.

Otro de los posibles retornos es el de Domino’s Pizza, cadena norteamericana que tuvo un fugaz paso por el país a mediados de los ’90. En la región, la franquicia es operada por la mexicana Alsea, que tiene también en su cartera a marcas como Burger King y Starbucks.

También la cadena norteamericana Taco Bell salió a la búsqueda de un operador máster con experiencia. La firma especializada en tacos y burritos mexicanos, que ya opera en otros países de la región, como Brasil, Chile, Perú y Panamá, busca poner un pie en el país por primera vez.  /El Economista