Martes 03 de Junio de 2025, 12:40
El Gobierno evalúa una solución social para el conflicto que rodea La Salada, uno de los puntos donde se venden mercadería “trucha” y también productos que ingresan por la frontera norte.El juez federal de Quilmes, Luis Ármela, ordenó la clausura del centro comercial y la detención del “Rey” de esa feria, Jorge Castillo.
En la causa se investiga una enorme maniobra de dinero que surge de las ventas ilegales.
Varios puesteros reclamaron la reapertura de esas ferias. Incluso hubo cortes en el llamado Camino Negro y este martes marchas a la Municipalidad de Lomas de Zamora.
Ahora, la fiscal federal Cecilia Incardona debe pronunciarse sobre ese punto, luego resolverá el juez Armela.
La intención del Gobierno es que ese centro comercial siga clausurado.
La gestión de Javier Milei puso el ojo en ese fenómeno comercial que crece sin límite en Lomas de Zamora luego de que un trabajo de la Secretaria de Comercio de los Estados Unidos puso como exigencia, antes de avanzar en un acuerdo comercial, que se solucione la falsificación de marcas que se comercializan en ese lugar.
Pero La Salada desató un fuerte problema social: miles de familias quedaron giran en torno a esa economía informal, de la noche a la mañana, se quedaron sin ingresos. No se trata de Castillo y sus hombres, que acumularon fuertes sumas ilegales, sino de personas que apenas ganan para subsistir.
Por eso, en el Ministerio de Seguridad, que movilizó a las tres fuerzas federales para mantener el control en Camino Negro, y también en la provincia de Buenos Aires, detectaron ese problema y se pusieron a buscar una solución.
Está en formación una mesa de trabajo entre ambas jurisdicciones para buscar una solución al problema social: una de las alternativas es ofrecerle a los puesteros que reabran sus lugares de trabajo en otras zonas del municipio o de localidades cercanas. Hay dos urgencias. La primera, permitir que esas personas tengan fuentes de ingreso sin la necesidad de darles subsidios.
Y la segunda es atender un problema de seguridad: mañana se realiza la habitual marcha de los jubilados frente al Congreso Nacional. Será una movilización caliente, como suele ocurrir los últimos Miércoles de cada semana, pero agravado por el hecho de que mañana, en la Cámara baja, la oposición impulsa varios proyectos para aumentar las jubilaciones y descolocar al Gobierno.
El escenario sería más grave aún si a esa marcha se suman los puesteros de La Salada. Una situación virtualmente explosiva que obligará al Gobierno a hacer mañana un fuerte operativo de seguridad. /
TN