Sábado 02 de Agosto de 2025, 07:08
Un nuevo caso de sextorsión sacudió la ciudad de La Banda, en Santiago del Estero, luego de que una joven de 23 años denunciara ante la Comisaría 13 que su expareja la amenazó con viralizar un video sexual suyo si lo denunciaba por una deuda económica pendiente. La causa ya es investigada por la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual del Poder Judicial santiagueño.El episodio ocurrió en la tarde del viernes, pasadas las 16:30, cuando la víctima —originaria de Los Ardiles, pero residente en el barrio Parque— se presentó ante las autoridades visiblemente alterada y en medio de una crisis nerviosa. Según su relato, su expareja, identificado como
Diósquez, de 26 años y con domicilio en Pozo Hondo, había comenzado a hostigarla luego de que ella le reclamara el dinero que le había prestado durante la relación sentimental, la cual había finalizado hacía aproximadamente dos meses.
De acuerdo con la denuncia policial, la joven le exigió por WhatsApp la devolución del dinero, a lo que el acusado respondió con una amenaza directa: “Hacé lo que quieras, vamos a ver quién queda peor. Peor va a ser que se viralice el video que tenés conmigo”. El mensaje, según la víctima, llegó acompañado por un video de contenido sexual que podía visualizarse una sola vez, utilizando la función de visualización única de la aplicación de mensajería.
La joven quedó consternada ante la posibilidad de que el material íntimo —grabado durante su relación— fuese difundido sin su consentimiento, y temió que el acusado cumpliera su amenaza como represalia por el reclamo económico y la eventual denuncia.
Tras recibir la denuncia, los uniformados notificaron de inmediato a la fiscal de turno, quien ordenó como primera medida cautelar la notificación al denunciado sobre la prohibición de divulgar el contenido audiovisual, bajo apercibimiento legal. Además, dispuso que se preserve toda la evidencia digital y que se profundice la investigación para determinar si el acusado ya había compartido el video o amenazado con hacerlo anteriormente.El caso fue caratulado como sextorsión, una modalidad delictiva que ha crecido exponencialmente en los últimos años con el uso extendido de redes sociales y aplicaciones de mensajería. Esta forma de violencia digital contra las mujeres puede configurar diversos delitos, entre ellos amenazas, coacción, extorsión y violación a la privacidad.
Las autoridades del Ministerio Público Fiscal instaron a quienes atraviesen situaciones similares a denunciar de inmediato, recordando que la difusión no consentida de material íntimo constituye una violación a los derechos fundamentales de la persona y está penada por la ley.
La víctima continúa recibiendo asistencia y contención psicológica, mientras la Justicia avanza con la recopilación de pruebas digitales. No se descartan nuevas medidas en las próximas horas, incluido el allanamiento del dispositivo del acusado para constatar la existencia del video y si hubo intentos de difusión.
Este nuevo caso expone la urgencia de abordar con seriedad y perspectiva de género las violencias digitales, y reabre el debate sobre el uso ético de la intimidad en la era tecnológica.