Procesaron al tucumano que fue detenido cuando recibía pastillas de extasis por encomienda

Lunes 08 de Septiembre de 2025, 05:46

AUDIENCIA BLOQUEADA. El juez Esteban Hansen impidió que la audiencia fuera accesible para el periodismo, en una medida que generó muchos comentarios y suspicacias.



Un tucumano fue procesado por integrar una organización dedicada al transporte y comercialización de éxtasis a nivel nacional, pero continuará el proceso en libertad tras un planteo de su defensor que convenció al juez interviniente. 

La causa tiene particular relevancia por dos aspectos: la base operativa de la banda en Córdoba, liderada por jujeños, y el uso del sistema de encomiendas para trasladar droga a distintas provincias, un método cada vez más utilizado por narcotraficantes ante la falta de controles efectivos.

El martes, Gastón Bernabé Morales González fue detenido en Tucumán tras retirar una encomienda en una empresa de transporte: en la caja había 200 pastillas de éxtasis. Casi al mismo tiempo, la Policía Federal arrestó en Córdoba a Jorge Tirado Yelma y Fernanda del Rosario Ticona Severich, mientras que en Jujuy cayó Juan José Vázquez, señalado como el presunto cabecilla de la red.

En el allanamiento al domicilio tucumano de Morales González, los investigadores secuestraron 50 gramos de marihuana, tierra preparada para cultivo y fertilizantes. En los inmuebles de los demás acusados también se incautaron estupefacientes, aunque no se precisó la cantidad ni el tipo.

El caso se inició en 2022, cuando un joven detenido en Jujuy por comercializar éxtasis aceptó convertirse en testigo arrepentido y apuntó a Vázquez como su proveedor. Desde entonces, la Justicia reconstruyó la logística: Tirado Yelma enviaba las pastillas desde Córdoba, Vázquez organizaba la distribución en Jujuy y otros colaboradores —entre ellos Morales González y la joven detenida— prestaban sus nombres para recibir encomiendas.

Las autoridades sospechan que en los últimos meses se enviaron al menos siete cargas, lo que representaría más de 1.500 pastillas en circulación. Según la tabla de valores de Gendarmería Nacional, cada dosis cuesta U$S35 en el NOA, lo que implica un valor en las calles cercano a los U$S525.000.

Aún resta determinar el origen de la droga. La hipótesis más firme es que la organización no producía el éxtasis, sino que lo adquiría al por mayor en Córdoba o lo ingresaba desde Bolivia, donde, según informes internacionales, cárteles mexicanos habrían instalado laboratorios de drogas sintéticas.

El caso se conecta con otras investigaciones recientes: hace dos meses, en Jujuy, Gendarmería allanó una farmacia y un comercio en una causa vinculada al acopio de fentanilo detectado en Misiones, también distribuido por encomiendas.

En la audiencia de formulación de cargos realizada el viernes, la fiscala federal de Jujuy Lucía Orsetti pidió la prisión preventiva hasta febrero de 2026 para los cuatro imputados. Sin embargo, el juez federal Esteban Hansen resolvió de manera diferenciada: dictó prisión preventiva para Vázquez y Tirado Yelma, mientras que Morales González y Ticona Severich continuarán el proceso en libertad, aunque procesados por transporte de drogas.

El defensor del tucumano, Aníbal Paz, sostuvo que su cliente es “un consumidor, técnico universitario, con arraigo, sin antecedentes y sin pruebas que lo vinculen a la venta de éxtasis”.

La audiencia, desarrollada en modalidad virtual, estuvo marcada por polémicas: el juez Hansen restringió el acceso de la prensa, pese a que este tipo de debates son públicos. Incluso, un funcionario judicial llegó a exigir a un periodista que revelara la fuente que le había facilitado el link de ingreso, lo que encendió críticas por violación al derecho constitucional a preservar la confidencialidad de las fuentes informativas.