Lunes 03 de Diciembre de 2018, 08:13
Central Córdoba de Santiago se quedó con un nuevo título de fútbol femenino, al vencer el domingo a Mitre por 2 a 0, en la gran final del certamen oficial de la temporada 2018.
El mismo se llevó a cabo en la cancha del club Antonio Tagliavini. Aunque, el encuentro no terminó de la manera esperada.
Minutos antes del final, tuvo que ser suspendido por el árbitro debido a las agresiones que sufrió de parte de dos jugadoras de la entidad del Barrio Oeste y por una serie de tumultos, que no le hacen nada bien a este hermoso deporte.
A pocos minutos del final, el árbitro le mostró el acrílico rojo a la jugadora de Central, Morales, por una fuerte falta sobre Ruiz. Y en ese instante, se armó la trifulca.
Dos futbolistas del equipo del Barrio Oeste, disconformes con la decisión del juez, lo agredieron, el árbitro también respondió en una situación lamentable y se generaron inconvenientes entre ambos planteles.
Otras futbolistas, trataron de calmar esta fea situación que se generó, ya que también había ingresado gente que estaba observando el encuentro a un costado del campo de juego.
Finalmente,
el árbitro tuvo que suspender el cotejo, a pocos minutos del cierre.
Pero luego de algunas conversaciones, se decidió darle por ganado al elenco del Barrio Oeste, pese a que restaban algunos minutos para su culminación.
Fuente: http://www.nuevodiarioweb.com.ar/noticias/2018/12/03/177151-ni-el-futbol-femenino-se-salva-de-la-ola-de-violencia
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