Controlador, narcisista y obsesivo: ¿Quién es Tomás Gimeno, el monstruo que secuestró a sus hijas para vengarse de su exmujer?

Viernes 11 de Junio de 2021, 09:55

Mientras se confirmó el hallazgo del cuerpo de Olivia (6), una de sus niñas, en el fondo del mar a la altura de la ciudad de Tenerife, la policía española busca al sujeto y a la beba de un año, que se encuentran desaparecidos desde hace varias semana



Por estos días un escalofriante caso conmueve a la sociedad española, ya que la separación de una pareja trajo aparejado un episodio trágico y que desafortunadamente, todavía no tiene un desenlace cierto.

Para saber quién es este sujeto, hay que decir que nació en la isla de Tenerife en un familia de renombre y dueña de muchos tierras agrícolas, en la cual el hombre administraba varias empresas vinculadas al sector de las flores y plantas.

Leé también: Horror en Tenerife, España: un padre arrojó a sus dos hijitas al mar en bolsas atadas al ancla de su lancha

Tomás tenía fama de problemático en la isla, le gustaba la vida nocturna, peleaba constantemente con otras personas en bares y discotecas e incluso fue acusado de robos, a pesar de ser una persona adinerada. Además, en su historial delictivo, aparecen intentos de estafa para cobrar seguros de barco y vehículos, y numerosas multas de tráfico.

De sus padres se conoce poco, son personas muy herméticas que han rechazado todo contacto con los medios españoles que han intentado acercase a ellos. Lo que sí conoce es que el proceso de separación de Tomás con su ex pareja fue difícil, con acusaciones de violencia de parte de él que nunca transcendieron al terreno judicial.

Tomás Gimeno y sus hijas, una muerta y otra desaparecida (Twitter).

A pesar de la relación conflictiva con su ex, sus amigos cercanos los describen como un buen padre, por la relación que tenía con sus hijas. Además de ser una persona “enérgica, impulsiva, muy trabajador y un poco hippie”, según dijeron en el programa de la tv española Ya es mediodía.
Tomás Gimeno había amenazado con llevarse a las niñas (Twitter).

Antes de las desaparición de las dos niñas, Tomás había manifestado su deseo de irse de Tenerife. El hombre le había dicho a la madre de sus hijas que “una cosa es salir de la zona de confort, y otra es cambiar de continente”. Supuestamente, esto se lo dijo cuando se enteró que Beatriz había rehecho su vida con un empresario belga.

De esa relación se enteró porque en julio del 2020 contrató una agencia de detectives para espiarla y cuando supo que estaba con otra persona la enfrentó.

Beatriz Zimmermann, madre de las niñas (Twitter).

Gimeno no pudo aceptar la relación de su ex mujer con otro hombre, la solo idea lo atormentaba. “Qué fácil aceptar que pierdes una familia con la que llevas toda una vida, perder el control de tus hijas”, le habría dicho a su ex, según informó un portavoz de la familia de las niñas.

La intención de Tomás era llevarse a sus hijas a América Latina, según informaron fuentes cercanas y a su ex se lo hizo saber, le dijo que iba a desaparecer con ellas. Pero todos creyeron que era solo eso: amenazas de un hombre desesperado, de alguien que no podía soportar que su relación, ahora sí y de una vez por todas, no tenía retorno, si es que alguna vez lo tuvo.

Hallazgo del cuerpo

Lo peor ocurrió este jueves cuando encontraron en el mar el cadáver de Olivia, la mayor de las dos hermanas desaparecidas en Tenerife el 27 de abril pasado. Hasta el momento, la única certeza que tienen las autoridades es que Gimeno, el padre de las dos niñas, fue la última persona que estuvo con ellas.

El día de la desaparición, Gimeno fue visto embarcando seis bolsas en la lancha de su propiedad con la que partió de Santa Cruz de Tenerife. Hasta ahora, la investigación de la policía sugiere que el hombre podría haberse suicidado junto con sus hijas, a quienes habría ahogado en el mar.

El cuerpo de Olivia fue hallado a 1.000 metros de profundidad (Twitter).

El cuerpo de la menor fue hallado por el robot del buque de búsqueda Ángeles Alvariño durante el mediodía del jueves, a unos 1.000 metros de profundidad y a menos de 5 kilómetros de la costa tinerfeña. Junto a la bolsa de deporte en la que se encontró a Olivia, había otra bolsa vacía, informó El País.

“Estamos sin poder decir palabra, tenemos que ser prudentes y esperar la confirmación de la prueba de ADN, pero ninguno esperábamos un hecho como este”, dijo Joaquín Amills, portavoz de la familia y presidente de la Asociación SOS Desaparecidos.

Consternación por la muerte de Olivia (Twitter).

Amills dijo que tenían la esperanza de que Tomás no le hiciera nada a sus hijas, al juzgar por las últimas que le dijo a Beatriz: “No las vas a volver a ver. Las voy a cuidar”. “Esas palabras salieron de su boca”, concluyó el portavoz de la familia. /Crónica