El mandatario de Florida se manifestó acerca de la magnitud del desastre. ”Nunca habíamos visto inundaciones como esta”. Mientras tanto, continúan las búsquedas para encontrar a veinte pasajeros en un barco de migrantes que naufragó el miércoles cerca del archipiélago de los Cayos, ligeramente alejado de la trayectoria del huracán. “Algunas áreas como Cape Coral, la ciudad de Fort Myers, han sido devastadas”, continuó declarando DeSantis, quien calificó el actual daño de su Estado como algo “histórico”.
Las autoridades de Florida confirmaron que más de 700 personas han sido rescatadas en los condados afectados. (Twitter)
El huracán Ian deja muertos y destrucción en Florida (Twitter)
Otros de los daños registrados es el de dos puentes en la costa suroeste, Sanibel Causeway y Pine Island Bridge, que conectan el continente con dos islas cerca de Fort Myers. Los mismos han sido destruidos y requerirán una “reconstrucción estructural”, explicó DeSantis, según consignó la agencia ANSA.
El gobernador republicano también pudo hablar por teléfono con el presidente estadounidense,
Joe Biden, para discutir los pasos a tomar desde la administración para apoyar a Florida ante el desastre que ha ocasionado el huracán. Como respuesta, Biden anunció que enviará al sitio a Deanne Criswell, la directora del FeMA (protección civil de Estados Unidos), para evaluar los daños.
Además, el presidente de Estados Unidos no tardó en declarar el estado de desastre en Florida luego del paso del huracán Ian. “Podría ser el huracán más mortífero en la historia de Florida, escuchamos noticias de pérdida sustancial de vidas”, advirtió el presidente norteamericano hablando desde la sede de FEMA. “En momentos como estos, Estados Unidos se une y se unirá como un solo equipo”, agregó Biden.
Anuncios del máximo mandatario estadounidense desde el FEMA. Foto: Twitter/@POTUS
Cabe destacar que desde la presidencia se asignaron fondos federales para ayudar a los condados más afectados: la ayuda incluye subvenciones para viviendas temporales y renovaciones de viviendas, préstamos de bajo costo para cubrir propiedades no aseguradas y otros programas para ayudar a los empresarios a recuperarse de los efectos del desastre.
Después de azotar Cuba, Ian aterrizó en Cayo Costa, cerca de Fort Meyers, como uno de los huracanes más violentos que haya azotado Estados Unidos. Las ráfagas de vientos alcanzan los 240 km por hora. /
Los Andes