Martes 04 de Marzo de 2025, 11:48
De repente, el parlamento de Serbia se convirtió en un caos. Bombas de humo, bengalas e insultos cruzados invadieron el recinto. Un todos contra todos, pocas veces visto. Un bochorno. El escándalo surgió cuando se debatía un aumento en el financiamiento universitario. Al menos tres legisladores resultaron heridos, uno de ellos de gravedad.
"Serbia se levanta para derrocar al régimen", fue la pancarta presentada por la oposición, mientras tenía curso el debate. Esa acción desató el caos.
En principio, estaba previsto que los diputados votaran una ley que aumentaría el financiamiento para la educación universitaria, pero los partidos de la oposición insistieron en que la sesión era ilegal.
Solicitaban la renuncia del primer ministro, Milos Vucevic, y de todo su gobierno.
Tras una hora de inicio de la sesión, se mostró la pancarta y los opositores comenzaron a hacer sonar silbatos dentro del recinto. Una especie de llamado de guerra. Lo que viene segundos después es difícil de describir.
Insultos, bombas de estruendo, bengalas cruzadas y humo invadieron el recinto. Un caos.
Las imágenes de video tomadas en la cámara mostraron primero un enfrentamiento entre legisladores, y luego el lanzamiento de bengalas y bombas de humo. Según la prensa serbia, también se arrojaron huevos y botellas de agua. Las autoridades indicaron más tarde que los disturbios causaron heridas a tres personas.
El escándalo se apoderó del parlamento serbio: Bengalas y bombas de humo ya fueron lanzadas desde un sector.La presidenta del parlamento, Ana Brnabic, acusó a la oposición de ser una “banda terrorista” y apuntó que uno de los legisladores heridos estaba en "estado grave".