Una médica palestina perdió a nueve de sus diez hijos durante un bombardeo del ejército de Israel que alcanzó su casa

Domingo 25 de Mayo de 2025, 06:23

DOLOR. Una mujer palestina muestra en su celular la foto de dos de los nueve hermanos que fallecieron en uno de los recientes bombardeos de Israel.



La pediatra Alaa Najjar estaba de guardia en el Hospital Nasser, en la localidad palestina de Jan Yunis, cuando tuvo que salir corriendo a su casa sólo para encontrarla en llamas, luego de una nueva ofensiva aérea israelí al enclave.

Nueve de los 10 hijos de Najjar murieron en el ataque, le dijeron colegas horrorizados de la médica a las agencias de noticias que cubren el conflicto. Los niños son Yahya (12 años), Rakan (10), Raslan (7); Jibran, (8), Eve (9), Rival (5), Sadin (3), Luqman (2) y Sidar (siete meses), informó el Ministerio de Salud del Gobierno de Hamás en Gaza.

En principio dos de los cadáveres de los niños habían quedado bajo los escombros, pero otros siete fueron recuperados rápidamente y llevados al hospital junto al marido de la doctora, el también médico Hamdi Al Najjar, y con Adam, el único hijo superviviente (11 años), ambos heridos de gravedad.

Muneer Alboursh, director general del Ministerio de Salud, escribió en X que el ataque ocurrió poco después de que Hamdi Al Najjar llevara a su esposa al trabajo. "Pocos minutos después de su regreso, un misil impactó en su casa", dijo, añadiendo que el médico se encontraba "actualmente en cuidados intensivos".

En el video del rescate de los cadáveres se observaba a los brigadistas de Defensa Civil de Gaza y la Media Luna Roja Palestina sacando de la vivienda, uno tras otro, los cuerpos carbonizados de los niños. Hamás calificó el ataque como un "crimen brutal".

El Ejército de Israel informó en un comunicado que atacó a sospechosos que operaban desde una estructura cercana a sus fuerzas y describió el área de Jan Yunis como una "zona de guerra peligrosa". Dijo que había evacuado a civiles del área y tras el impacto de la noticia de la muerte de los niños argumentó "las afirmaciones sobre el daño a civiles no involucrados están bajo revisión".

Más temprano el sábado, un comunicado reportó que la fuerza aérea de Israel atacó más de 100 objetivos en toda Gaza en el último día.

En total, se registraron 79 muertos por ataques israelíes que han sido llevados a hospitales en las últimas 24 horas, informó el sábado el Ministerio de Salud de Gaza.

El Ministerio gazatí indicó que las nuevas muertes elevaron a 53.901 la cantidad de víctimas desde el ataque liderado por Hamás el 7 de octubre de 2023 en Israel, que dio paso a la actual guerra. El ministerio dijo que 3.747 personas han muerto en Gaza desde que Israel reanudó la guerra el 18 de marzo, en un esfuerzo por presionar a Hamás para que acepte diferentes términos para un alto el fuego. Su conteo no diferencia entre civiles y miembros del grupo armado.

La presión de Israel sobre Hamás ha incluido un bloqueo de Gaza y sus más de 2 millones de personas desde principios de marzo. Esta semana, el primer pequeño número de camiones de ayuda ingresó al territorio y comenzó a llegar a los palestinos desde que comenzó el bloqueo.

Las advertencias de hambruna por parte de expertos en seguridad alimentaria y las imágenes de palestinos desesperados pelando por porciones de comida en el número cada vez menor de cocinas de caridad llevaron a los aliados de Israel a presionar al gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu para permitir que regrese algo de ayuda.

COGAT, el organismo de defensa israelí que supervisa la ayuda para Gaza, reconoció que 388 camiones habían ingresado desde el lunes. Durante el alto el fuego, entraban unos 600 camiones al día.

El gobierno de Netanyahu ha buscado un nuevo sistema de entrega y distribución de ayuda por parte de un grupo recién establecido respaldado por Estados Unidos, pero las Naciones Unidas y sus socios lo han rechazado, diciendo que permite a Israel usar la comida como arma y viola los principios humanitarios.

Israel ahora podría estar cambiando su enfoque para permitir que los grupos de ayuda sigan a cargo de la asistencia no alimentaria, según una carta obtenida por la agencia de noticias AP. Israel acusa a Hamás de desviar la ayuda, pero la ONU y los grupos de ayuda niegan que haya una desviación significativa.

Sin embargo, Israel insiste en que continuará atacando Gaza hasta que Hamás libere a todos los 58 rehenes israelíes restantes y se desarme. Se cree que menos de la mitad de los rehenes están vivos desde el ataque del 7 de octubre, en el que militantes mataron a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a otras 251.

Hamás sostiene que devolverá a los rehenes restantes a cambio de más prisioneros palestinos, un alto el fuego duradero y una retirada israelí del territorio. Netanyahu ha rechazado esos términos y ha prometido mantener el control sobre Gaza y facilitar lo que él llama la emigración voluntaria de gran parte de su población palestina.

“El gobierno israelí y su líder tienen una elección clara: acuerdo o guerra, salvar vidas o abandono”, dijo Liran Berman, hermano de los rehenes Gali y Ziv Berman, en la manifestación semanal en Tel Aviv mientras familias y simpatizantes exigían nuevamente un acuerdo que traiga a todos de regreso a casa. /Clarín