Martes 15 de Julio de 2025, 07:33
Una mujer fue detenida en la ciudad santafesina de Cañada de Gómez, sindicada como partícipe secundaria en un resonante robo cometido en Santiago del Estero. Según la investigación, habría prestado su firma en febrero pasado para la compra de un vehículo que, semanas después, fue utilizado por una banda criminal para despojar a un contador de más de $ 250 millones en distintas monedas.El golpe ocurrió el 10 de marzo en las oficinas del profesional, ubicadas sobre calle 24 de Septiembre al 200, en pleno centro de la capital santiagueña. En un operativo delictivo que se concretó en pocos minutos, los delincuentes lograron llevarse U$S 180.000, € 10.000 y $ 5 millones en efectivo, sin forzar accesos ni activar alertas de seguridad. La denuncia fue radicada en la Seccional Primera, y desde entonces trabajan en la causa agentes de la jurisdicción junto a efectivos de Homicidios y Delitos Complejos.
La clave del avance en la causa fue el seguimiento de cámaras de seguridad, que permitió detectar al menos dos vehículos que circulaban con frecuencia inusual en la zona de 24 de Septiembre, entre Urquiza y 9 de Julio. Uno de esos vehículos, con patente santafesina, fue rápidamente ubicado en los registros viales de rutas 9 y 34, lo que llevó a identificar su titularidad. Así fue como la investigación condujo a una mujer residente en Cañada de Gómez, quien habría rubricado el formulario 08 de transferencia del automóvil.
La sospechosa fue identificada como una ama de casa sin antecedentes penales, cuya firma quedó registrada en la documentación del vehículo. Según trascendió, cuatro hombres la habrían visitado en febrero pasado con la propuesta de firmar papeles para adquirir un auto a nombre de su esposo, a cambio de $ 200.000, dinero que la familia aceptó ante la falta de ingresos. Sin embargo, el mismo coche fue luego utilizado por los delincuentes en el multimillonario atraco al contador santiagueño Daher.
Este miércoles por la mañana, la mujer será indagada por el equipo del fiscal Belluomini. Estará asistida por las abogadas Natalia Delfina Valdez y Florencia Gómez, quienes adelantaron que su clienta no negará haber estampado su firma, pero lo habría hecho “de buena fe”, sin saber que se trataba de una maniobra delictiva. “Nuestra representada fue engañada. Firmó creyendo que ayudaba a un vecino con problemas de papeles. Nunca imaginó que su nombre sería utilizado para encubrir un hecho criminal”, sostuvo Valdez en declaraciones a El Liberal.
El expediente ahora gira en torno al seguimiento de ese vehículo y otros rodados detectados en la zona del golpe. Para los investigadores, la ama de casa forma parte del círculo periférico de una organización delictiva de mayor escala, cuyos integrantes sí habrían planificado y ejecutado el robo.
Fuentes judiciales confirmaron que los registros de las cámaras muestran la presencia reiterada de una camioneta 4x4 y un auto particular en la zona de la oficina del contador, lo que refuerza la hipótesis de que la víctima fue “marcada” con anticipación.
Las autoridades trabajan con perfiles de los posibles autores materiales e intelectuales, algunos con domicilio en Santa Fe y otros presuntamente radicados en Santiago del Estero. Mientras tanto, la Justicia intenta determinar el grado de implicancia de personas que podrían haber sido utilizadas como “testaferros”, sin conocer los verdaderos fines de sus acciones.
La causa avanza con hermetismo, pero con el firme objetivo de desarticular la cadena de responsabilidades detrás de uno de los robos más cuantiosos registrados en la provincia en los últimos años.