Un antecedente similar complica al trapito acusado de provocar la muerte de un hombre
Miércoles 22 de Octubre de 2025, 07:35
PERICIAS. Personal del Ministerio Público Fiscal recoge pruebas en el lugar donde se desencadenó la escena que terminó con la muerte de Julio César Cancino.Un robo callejero en el barrio Sibantos, de Los Pocitos, terminó en tragedia y dio origen a un caso judicial inusual: la Justicia tucumana imputó por homicidio a un acusado de robo, luego de que un hombre muriera de un infarto mientras intentaba evitar el asalto a una mujer. La decisión judicial generó un intenso debate en los pasillos de Tribunales por el alcance de la figura penal aplicada.
Testigos aseguraron que Cancino fue uno de los primeros en acudir en ayuda de la mujer. Junto a su primo persiguió al presunto ladrón, logró alcanzarlo y lo redujo a golpes. “Le dio dos piñas y se sentó encima para que no se escapara, pero de pronto se desplomó sin vida”, relató un vecino.
La primera hipótesis fue que Graneros lo había herido con un cuchillo encontrado en su poder, pero el informe médico descartó esa versión. La autopsia confirmó que Cancino murió de un infarto: tenía un corazón con el doble de peso normal y múltiples placas arteriales, según detalló el forense.
Pese a que el fallecimiento se debió a causas naturales, el fiscal Carlos Sale consideró que el acusado tuvo participación indirecta en la muerte, ya que el esfuerzo realizado por Cancino se produjo como consecuencia del intento de robo. Por ello, Graneros fue procesado por homicidio en concurso con robo agravado, una imputación poco frecuente que ya cuenta con antecedentes en la provincia.
Durante la audiencia, la auxiliar fiscal Luz Becerra explicó que aún faltan los resultados definitivos de la autopsia para confirmar el nexo causal entre el hecho y la descompensación cardíaca. Recordó además un caso similar ocurrido en 2021, cuando un padre murió de un infarto al perseguir a dos asaltantes en San Miguel de Tucumán, quienes fueron condenados por homicidio en ocasión de robo.
Graneros, conocido en la zona por realizar tareas informales y con antecedentes por delitos contra la propiedad, se encontraba bajo una condena condicional vigente al momento del hecho. Ante esa reiterancia, el Ministerio Público Fiscal solicitó que permanezca detenido mientras avanza la investigación. El juez interviniente dictó prisión preventiva por 60 días, a la espera de los resultados periciales y del análisis de los teléfonos secuestrados.
Vecinos de Los Pocitos expresaron su conmoción por la muerte de Cancino, al que describieron como “un hombre solidario que murió haciendo el bien”.
Entretanto, el acusado permanece alojado en una dependencia policial, mientras la fiscalía busca definir si la tragedia se enmarca dentro de un homicidio en ocasión de robo o si corresponde una imputación menor por el intento de asalto.
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