Un economista propuso un impuesto al dinero y Milei le respondió "kirchnerista=ladrón"

Martes 11 de Noviembre de 2025, 08:30

El Presidente cargó contra el exfuncionario de Cristina Kirchner, luego de que se viralizara un video en el que propone cobrar impuestos al uso de efectivo



El economista Emmanuel Álvarez Agis, exviceministro de Economía durante el segundo gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, con Axel Kicillof, y actual titular de la consultora PxQ, propuso reemplazar el Impuesto al Cheque por un nuevo gravamen sobre las extracciones de efectivo.

La idea, que busca incentivar la formalización económica, fue duramente cuestionada por el presidente Javier Milei, quien calificó la medida como una forma de "robo" al consumidor y la vinculó con la lógica "recaudatoria" del kirchnerismo.

La propuesta de Emmanuel Álvarez Agis para cobrar un "impuesto al efectivo"

Durante una entrevista en El Destape, Álvarez Agis explicó que su propuesta se basa en un esquema de "palo y zanahoria", es decir, eliminar un impuesto que afecta a los sectores formales y reemplazarlo por uno que desincentive el uso de efectivo.

"El consumidor te exige pagar con medios digitales de pago, porque vos tenés un impuesto al efectivo, eso obliga al comercio a formalizarse y sobre todo premia a todas las compañías, como la mía, que tenemos todos los flujos formalizados", sostuvo.

El exfuncionario detalló que el nuevo tributo se aplicaría sobre los retiros de efectivo y que su objetivo sería empujar a los consumidores y comercios hacia las operaciones bancarizadas.

Según su planteo, "la idea es eliminar el impuesto al cheque, que es una penalidad a la economía formal, y reemplazarlo por un impuesto al efectivo". En términos de carga fiscal, afirmó que la propuesta sería neutral, ya que reduciría la presión sobre quienes operan de manera formal y la aumentaría sobre la economía informal.

La crítica de Javier Milei al ex funcionario kirchnerista

El debate estalló cuando, durante la entrevista, Álvarez Agis ejemplificó el alcance del impuesto: "Voy al cajero, pongo $1.000 y salen $900", sugiriendo que la tasa podría alcanzar el 10% de los montos extraídos. Ese fragmento se viralizó en redes sociales y generó fuertes críticas de referentes libertarios. El diputado bonaerense Agustín Romo, presidente del bloque oficialista, fue uno de los primeros en cuestionar la idea, acusando al kirchnerismo de buscar "nuevas formas de recaudar".

El propio Milei amplificó la polémica al citar el video en su cuenta de X con un mensaje contundente: "KIRCHNERISTA = LADRÓN. El que fue viceministro de economía de Kicillof propone de modo abierto robarte el 10% de tus ingresos que destines al consumo. Jamás piensan en achicar el gasto sino sólo en cómo recaudar más para ser ellos quienes deciden cuánto y en qué gastar tu dinero." Con esa publicación, el Presidente instaló la discusión sobre la estructura tributaria en el centro del debate político.

Álvarez Agis sostuvo después que su propuesta fue "malinterpretada" y que los recortes difundidos "desvirtuaron su sentido original". Enfatizó que su planteo no busca aumentar la presión fiscal, sino modificar los incentivos para combatir la informalidad: "La medida está pensada para que, en términos de presión tributaria, sea neutra para la economía en su conjunto, pero le bajás la presión fiscal al universo formal y le subís y le dificultás la vida al universo informal."

El economista también remarcó que su propuesta sigue el ejemplo de políticas aplicadas en otros países que trasladan la demanda de formalización al consumidor, en lugar de concentrarse solo en las empresas. "Todos los programas que han bajado la informalidad en el mundo no le pusieron incentivos a las compañías, sino que pusieron la demanda de formalización del lado del consumidor", explicó.

Aunque la iniciativa no fue presentada oficialmente ni cuenta con respaldo legislativo, el intercambio volvió a encender la discusión sobre la política tributaria y el papel del Estado en la economía. Para Milei, cualquier nuevo impuesto sobre la demanda representa una intromisión estatal en la libertad individual, mientras que para sectores vinculados al kirchnerismo, la medida podría servir para reducir la evasión y ampliar la base de contribuyentes.

En definitiva, la propuesta de Álvarez Agis, que combina la eliminación de un tributo vigente con la creación de otro de orientación distinta, reavivó una vieja disputa: la que contrapone la reducción del gasto público con la búsqueda de nuevas fuentes de financiamiento.

El episodio también marcó un nuevo capítulo en la confrontación entre el oficialismo libertario y el kirchnerismo, esta vez en torno a uno de los temas más sensibles de la agenda económica: la recaudación y la formalización del sistema productivo argentino.  /iProfesional