Jueves 27 de Noviembre de 2025, 22:22
Con la expansión de las
plataformas de streaming y la facilidad para acceder a miles de títulos desde casa, podría pensarse que la mayoría de las personas variaría constantemente lo que ve. Sin embargo, un fenómeno muy común contradice esta lógica: muchas personas eligen
ver una y otra vez la misma película o serie, aun teniendo un catálogo infinito al alcance. Esta conducta, lejos de ser trivial, ha despertado el
interés de la psicología, que intenta descifrar qué hay detrás de ella.
La sensación de seguridad en lo familiar
La psicóloga Pamela Rutledge, del Media Psychology Research Center, explica que volver a ver contenido conocido puede generar una poderosa
sensación de seguridad y control. En momentos de estrés, ansiedad o tristeza, nuestra mente tiende a buscar lo predecible; aquello que ya conocemos
elimina la incertidumbre y reduce la carga emocional.
Según Rutledge, “el contenido familiar ofrece una sensación de control, reduce el estrés y proporciona seguridad emocional”. Al saber exactamente qué ocurrirá, desaparece la tensión de enfrentarse a situaciones nuevas y, en cambio, aparece una especie de refugio emocional donde todo es manejable.
Además, repetir una serie o película puede activar
recuerdos del pasado, conectar con momentos más felices y reforzar nuestra identidad. Es, en cierto modo, un retorno simbólico a un espacio emocional seguro.
Reviviendo emociones y profundizando significadosLa idea de que
volver a ver un contenido es reconfortante también fue respaldada por un estudio publicado en el Journal of Consumer Research. Los investigadores descubrieron que no solo se trata de consuelo: quienes repiten películas o series buscan revivir experiencias positivas, recuperar emociones agradables o incluso explorar
capas más profundas de significado que pudieron pasar desapercibidas en la primera visualización.
Mirar una historia conocida puede ser como leer nuevamente un libro querido: cada repetición ofrece matices nuevos, interpretaciones distintas o incluso una comprensión más íntima del relato y de uno mismo.
Repetir para calmar la ansiedad: por qué funciona… y por qué a veces no
No es casualidad que muchas personas elijan una serie o película ya vista cuando la ansiedad aparece. El cerebro agradece la familiaridad en
momentos de desborde emocional. Sin embargo, esto no siempre es suficiente, porque cada persona y cada proceso emocional son particulares.
La psicóloga María José Ortolà, en declaraciones a La Vanguardia, recuerda que
regular la ansiedad es un
proceso complejo que exige compromiso y constancia. Según ella, “la ansiedad no se va con una frase bonita o un vídeo de Instagram. Se regula con decisiones pequeñas cada día”. Ver contenido familiar puede ayudar, pero no reemplaza el acompañamiento profesional ni las estrategias sostenidas en el tiempo.
Ortolà invita a quienes sufren ansiedad a pedir ayuda sin vergüenza, revisar sus rutinas y prestar atención a sus pensamientos. La repetición de una película puede ser un alivio momentáneo, pero la verdadera
regulación emocional requiere un trabajo más profundo.
Un refugio emocional modernoVolver a ver una serie o película no es simplemente un hábito ocioso: puede ser una estrategia de autocuidado emocional. En un mundo saturado de estímulos, noticias, obligaciones y cambios constantes, tener la posibilidad de refugiarse en una historia conocida puede ofrecer un instante de calma y estabilidad.
Y aunque la psicología advierte que no debe ser el único recurso para enfrentar la ansiedad o el estrés, también reconoce su valor: mirar algo que ya conocemos puede recordarnos quiénes somos, de dónde venimos y que, aunque todo cambie, hay pequeños lugares —aunque sea en forma de ficción— donde todavía podemos sentirnos seguros.