Sábado 07 de Noviembre de 2020, 14:17
El temor fue enorme en
Virginia, Estados Unidos. Allí, un grupo de vecinos se contactó con el Centro de Manejo y Control de Vida Silvestre del estado para reportar
la aparición de varios ejemplares de un extraño animal:una serpiente con cabeza de martillo."Es un fenómeno de la naturaleza", aseguraron varias personas cuando, de repente, su aparición se hizo cada vez más común. Inmediatamente, los expertos comenzaron a recorrer los diferentes lugares en donde se la había visto. Y llegaron a una conclusión:
el animal ni siquiera era una serpiente.
¿De qué se trata? En realidad,
es un gusano de cabeza plana, considerado una plaga. Su origen está lejos de tierras estadounidenses, sino que
es nativo de Asia.La teoría, entonces, es que algunas de estas especies hayan llegado al país americano escondidas en plantas, producto del comercio entre este país y otros del continente asiático desde principios del siglo XX.
En realidad, las serpientes son gusanos de cabeza plana. Foto: @justanothernakedape
Las características del gusano de cabeza planaPara tranquilidad de la población, expertos determinaron que
este tipo de gusano no es peligroso para humanos ni para mascotas, sino que únicamente puede afectar a otros gusanos de tierra.
Su nombre científico es
Bipalium Kewense. El Instituto de Especies Invasivas de Texas describió que para reproducirse, estos gusanos se dividen y la mitad posterior crece hasta convertirse en un gusano completo.
"Cuando un pequeño trozo de gusano se desprende, la mitad frontal se deslizará y, en unos 10 días, se formará una nueva cabeza en la mitad posterior. Un gusano puede regenerarse varias veces al mes", añadió el medio estadounidense Insider.
Esta característica, según los expertos, es lo que hace que este invertebrado sea muy difícil de matar, aunque algunos horticultores aseguraron que utilizan sal o esencia de naranja para controlarlos cuando se convierten en una plaga.
Por lo pronto, su tamaño puede ser de hasta 30 centímetros y generalmente tienen un color claro. Prefiere ambientes cálidos y húmedos, por lo que usualmente se lo puede encontrar en invernaderos. /
Clarín