Miércoles 20 de Agosto de 2025, 22:34
El jueves pasado, se desató un escándalo en la localidad santiagueña de Monte Quemado luego de que se diera a conocer que un hombre, identificado como Marcos Rolando Ávila, fue detenido por vender milanesas y chorizos que contenían papel higiénico.El hecho causó conmoción entre los vecinos: la comercialización de más de 20 kilos de comida en mal estado se realizó durante las fiestas patronales en honor a la Virgen del Carballo, donde asistieron miles de personas.
Una mujer que estuvo trabajando en la celebración religiosa aseguró que consumió un sándwich de milanesa y que, poco después, tuvo que ser internada por intoxicación. “Yo fui a trabajar a la fiesta de la Virgen del Carballo, ahí en Monte Quemado. Cuando terminó mi horario, fui a ese puesto a comprar algo para comer. Cuando llegué al hospedaje comencé a sentirme muy mal”, contó Daniela, la víctima que prefirió usar otro nombre para mantener el anonimato.
En cuestión de minutos, empezó a tener dolores de cabeza, vómitos y la presión baja. “Mi estómago se retorcía del dolor y después me quedé dormida”, agregó.
Durante la madrugada,
Daniela se despertó por el malestar que sentía y volvió a tener los mismos síntomas, pero con mayor intensidad. “Mis compañeros de trabajo me ayudaron y me llevaron al hospital. Me tuvieron casi 6 horas internada con suero”, detalló.En cuanto le dieron el alta, la mujer decidió volverse a la capital de Santiago del Estero, donde vive, para estar cerca de su familia y recibir una mayor atención médica debido a que está embarazada. “Solo le doy gracias a dios que no perdí mi bebé, porque la verdad la pasé muy mal", sostuvo Daniela en declaraciones para este medio.
Al llegar a su ciudad, se atendió en el Hospital Regional Ramón Carrillo, donde le indicaron que había sufrido una intoxicación leve.
El casoEl procedimiento de inspección que destapó el caso se realizó el jueves a las 10:30 en un local de comidas de la avenida Juan Domingo Perón y Lavalle, según el acta de clausura emitido por Calidad de Vida y Bromatología.
A Ávila, el comerciante detenido, se le incautaron varias bolsas con milanesas y chorizos en mal estado y con ingredientes no aptos para consumo humano. Además, se constató que el puesto no cumplía con las normas básicas de higiene: detectaron superficies sucias, manipulación directa de los alimentos y la presencia de papel higiénico en la comida.
Rápidamente, los inspectores municipales y las autoridades locales actuaron para evitar que los asistentes consumieran alimentos que podían representar un riesgo para la salud y clausuraron el comercio.
El vendedor ambulante, nacido en Tucumán, fue detenido por la Policía y se le inició una denuncia penal por la venta de productos alimenticios adulterados y en mal estado.
/TN