Jueves 27 de Noviembre de 2025, 06:22
El propietario de Piegari, Alberto Chinkies, advirtió que el emblemático restaurante porteño quedó "al borde del cierre" tras un fallo laboral que lo condenó a pagar más de $200 millones a un exempleado.
En una entrevista con Radio Mitre, el empresario afirmó que la sentencia de primera instancia "no se corresponde con la realidad" y que el monto fijado resulta "imposible de afrontar" para una pyme gastronómica.
Según relató, el conflicto se originó con un trabajador que se desempeñó durante más de dos décadas y que, según la versión del empleador, abandonó su puesto durante la pandemia al negarse a retomar tareas esenciales.
Chinkies sostiene que el despido fue "con causa", pero la jueza falló "100% a favor del empleado", incluso por encima de la cifra reclamada inicialmente.
El fallo llegó acompañado de un embargo preventivo de $160 millones sobre todas las cuentas bancarias del empresario, medida que —según explicó— paralizó la operatoria diaria del restaurante. "Me embargaron todas las cuentas. ¿Cómo hago para pagar sueldos, aguinaldos y proveedores?", cuestionó.
Afirma que, sin acceso a fondos, la continuidad del local y de sus más de 100 empleados está comprometida.
Chinkies también cuestionó los criterios de actualización aplicados por la Justicia y aseguró que, según el cálculo del fallo, "ese mozo debería ganar hoy $8 millones", un valor que considera "inaplicable" para el sector gastronómico. Reiteró que esperaba un resultado distinto y que su defensa presentó argumentos "razonables" para evitar una condena de tal magnitud.
El empresario confirmó que apeló la sentencia ante la Cámara, que aún no se expidió. Mientras tanto, el embargo sigue vigente y la empresa opera con fuertes restricciones financieras. "¿Qué tenemos que hacer? ¿Tenemos que cerrar?", planteó al describir un escenario crítico que pone en suspenso el futuro del restaurante y de su plantilla.
/El Economista