Los abogados del conductor presentaron un escrito de tres hojas en el juzgado de Ercolini, informando que "denunciaron al señor Cristóbal López en el fuero de instrucción". Entre los principales planteos, se advierte que se "estaría por vender (el Grupo Indalo) contra la voluntad" de algunos actores intervinientes en la productora.
La historia, se resume más o menos así: en septiembre de 2013, el Grupo Indalo le compró a Tinelli el 51% de su productora. Esto, según el entorno del empresario K, fue pagado. Pero en abril de 2016, le compraron un 19% restante, que estaría en deuda. También le deberían a Tinelli sus honorarios como conductor.
De todos modos, el impulso que había tomado la operación que buscan concretar el empresario K y su socio Fabián De Sousa, quedó en una meseta y con toda la atención de la Justicia. Con nuevo presidente y vicepresidente, y con De Sousa corrido de todos los directorios, la venta del Grupo Indalo parece caminar hacia el fracaso.
Cristóbal López, en una de sus visitas a Tribunales
La AFIP, querellante en la causa en la que López es investigado por no pagar el Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC) a través de Oil Combustibles (8.000 millones de pesos que usaron los dueños del holding "para financiarse y sobre todo a sus medios de comunicación"), ya se opuso a "cualquier operación". Su objetivo es que "López no cometa una insolvencia fraudulenta" y desconfían de los "términos del preacuerdo".
En fuentes oficiales se habla incluso de que el empresario podría terminar preso. En la Justicia relativizan por ahora la posibilidad, aunque advierten que su situación podría complicarse si insiste en avanzar con la venta del Grupo sin la venia judicial.
Por otro lado, los veedores judiciales nombrados en Indalo pidieron al Juez Ercolini que reclame la información a López y De Sousa. Entre otros puntos requeridos, pidieron que los dueños ante la Justicia del holding, expliquen la conformación actual de los directorios de las 170 sociedades que integran el grupo y todo lo que implique "la asunción de compromisos que puedan afectar el patrimonio o la marcha de las empresas".
En este escenario, Ercolini reclamó una gran cantidad de documentación a los dueños de Indalo. Fuentes judiciales reiteraron que "no hay posibilidad de venta en tanto persista la inhibición general de bienes, si venden están cometiendo un delito". Desde el entorno del empresario K señalaron a este medio que "continuarán con la operación, las nuevas autoridades asumieron".
Sucede que las nuevas autoridades del holding no son reconocidas por la Justicia y respecto a los medios de comunicación, la ENACOM que conduce Miguel De Godoy no los inscribirá. "Los dueños siguen siendo Cristóbal López y Fabián De Sousa, acá no presentaron nada y no se los inscribirá a OP como dueños", señalaron fuentes oficiales.
El juez reclamó al "zar del juego" todos los "movimientos financieros de las empresas en general y con otras empresas del grupo económico", modificaciones en los contratos, composición del directorio de todas las empresas, actas de asamblea y de directorios que hayan aprobados las modificaciones anunciadas, toda documentación de las partes sobre compromisos asumidos de posibles ventas.
La venta se impulsó después que López dejó de enviar fondos. "Cristóbal no quería poner más dinero en las empresas, y fue el límite para terminar de convencer de que había que vender", indicaron desde su entorno. Así, comenzaron a acumularse las deudas al interior del grupo. "No se pagó a algunos proveedores, algunos pagos de compra de acciones a Sergio Szpolski, y algunos honorarios de Marcelo Tinelli", admitieron.
El resto se dirime en la justicia. La inhibición general de bienes dictada por Ercolini es el principal impedimento para que la operación con el fondo inversor Op Investments se concrete. La medida cautelar “ordenada en función del delito que se investiga” impide “cualquier venta, desprendimiento o cambio accionario, hacerlo sería un delito penal”, señalaron fuentes judiciales.